La docencia y los demás servicios discurrirán con toda normalidad pues no quieren perjudicar a los alumnos “ya que ellos no tienen la culpa de la nefasta gestión de Cajasol y es importante asegurarles una formación y unos servicios de calidad, como siempre se les ha ofrecido”.
Una vez termine la jornada laboral, permanecerán en sendos centros a disposición de todos los alumnos y aquellas personas que así lo estimen.
Con esta huelga a la japonesa queremos mostrar nuestra disposición a querer seguir trabajando y demostrar que seguimos luchando por la viabilidad del centro, algo que sería posible con la voluntad de Cajasol”, señala en centro algecireño, que invita a partidos políticos, sindicatos, agentes sociales, alumnos, antiguos alumnos, amigos y a toda la ciudadanía en general a que se sume a su encierro en señal de apoyo.