En una entrevista concedida a Europa Press, el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, Maximiliano Vílchez (PP), ha incidido asimismo en que el Ayuntamiento trabaja con la idea de que en octubre de 2014 la tienda esté en funcionamiento; en este sentido, la empresa se ha pronunciado recientemente aludiendo a puntos relacionados con la tramitación urbanística, planeamiento, gestión y urbanización interior, que serían "esenciales" para plantear plazos en el proyecto.
Respecto a la vía de circulación, Vílchez ha expuesto que los posibles obstáculos de premura de plazos no obedecen tanto a la ejecución de la obra como a los trámites administrativos previos. Al respecto, "los técnicos nos dicen que tanto para un aspecto como para el otro estamos en plazo y puede hacerse, y de hecho ya se ha empezado a trabajar". Y es que ya existían estudios previos de planeamiento en la Gerencia de Urbanismo, ha señalado.
El edil de Urbanismo ha recordado que, frente a la pretensión de IKEA de obtener hasta 149.000 metros cuadrados de gran superficie comercial, el Ayuntamiento le hizo ver que "si eso se hacía así se obligaba a una modificación del PGOU, y no es que no se pueda hacer, sino que ello conllevaría un retraso importante en la tramitación", toda vez que el Consistorio entendía, desde el punto de vista técnico, que la iniciativa podía "caber" sin necesidad de que todas las instalaciones tuvieran dicha calificación.
"IKEA lo entendió así, y se pasó a estudiar cada uno de los proyectos que iban dentro del recinto, lo que nos ha llevado a tardar el tiempo que hemos tardado", ha manifestado Vílchez, que ha adjetivado el proceso de trabajo como "muy pormenorizado y detallado". Finalmente, ambas partes llegaron a la conclusión de que el plan general permitía hasta 123.000 metros cuadrados como zona de gran superficie comercial en este entorno, tal y como se recogía en el plan parcial, contando el resto con calificación de mediana superficie comercial.
Respecto a los usos terciarios de los más de 25.000 metros cuadrados restantes, el concejal ha confirmado que la multinacional plantea un área de comercio o servicio, donde tendría cabida "lo que habitualmente estamos acostumbrados a ver en las zonas donde se instala IKEA", en alusión a negocios como talleres de reparación de automóviles, cines o locales de restauración, aunque aún sin definir, "porque todavía no saben quién se instalará".
Este proyecto contará con una inversión de 60 millones de euros en su urbanización y 300 millones más para la implantación de IKEA, que se prevé cree 7.000 puestos de trabajo, de los que 4.000 serán directos, con un millar contratados de forma prácticamente inmediata con el inicio de la obra.