Es abogado defensor del empresario Jaime Febrer, considerado uno de los cabecillas del caso que investiga una trama de corrupción en el Ayuntamiento de Valencia
El síndic socialista en Les Corts Valencianes, Manolo Mata, renunciará el próximo viernes al escaño de diputado autonómico para centrarse en su labor como abogado defensor de uno de los principales acusados de la trama de corrupción Azud.
Mata es el abogado defensor del empresario Jaime Febrer, considerado uno de los cabecillas del caso Azud, que investiga una trama de corrupción en el Ayuntamiento de València durante el mandato del PP -en la que también están involucrados relevantes cargos socialistas-, lo que había generado críticas de la oposición, que cuestionaba que ejerciera de portavoz socialista y defendiera a la vez a Febrer.
El todavía síndic socialista ha explicado tras asistir al acto institucional del Día de Les Corts que mantendrá el cargo de vicesecretario del PSPV-PSOE, porque "ser abogado y socialista no es incompatible", y ha admitido que renuncia al escaño para no perjudicar a su partido, a la institución y al parlamentarismo.
Ha indicado que cuando accedió a defender a Febrer -"por razones accidentales" ya que no le conocía y su abogado le pidió que lo hiciera-, ya dijo que cuando se levantara el secreto de sumario tomaría una decisión si veía que era "muy complicado" compatibilizar el escaño con la defensa.
Ese secreto se levantó el martes y el volumen del sumario complica mantener el escaño, ha afirmado Mata, por lo que ayer habló con el president de la Generalitat y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, y le comunicó su decisión de dejar el escaño el próximo viernes, ya que miércoles y jueves hay pleno.
Mata ha asegurado que los 7 años que ha ejercido como síndic socialista han sido "la etapa más feliz" de su vida, y que cuando comenzó esta legislatura por él no habría continuado en el cargo, pero entonces Puig le pidió que el camino que habían comenzado juntos lo acabaran juntos, si bien ahora se queda "a mitad camino".
Ha admitido que Puig hubiera preferido que hubiera dejado la defensa de Febrer, pero ha reivindicado que ser síndic es una ocupación y ser abogado es su profesión, que además le gusta, al tiempo que ha lamentado que en general no se entienda que un político pueda llevar pleitos como este.
"Sabía que tenía que optar con seguir llevando la defensa o el escaño", porque implica dedicar "mucho tiempo" y es una cuestión "en primera línea política sobre la que se habla muchísimo", ha admitido el síndic socialista, para quien no poder hacer declaraciones sobre el caso hubiera perjudicado a su partido.
Mata ha confesado que la política es "lo más duro" que le ha pasado y hoy está "feliz", al igual que su familia y su entorno, porque supone "una liberación" dejar de "estar siempre en el ojo del huracán", mientras que ha asegurado que nunca dejará el partido.
"Soy abogado y socialista para siempre, hasta que me muera", ha enfatizado el síndic socialista, quien ha asegurado que le estará "eternamente agradecido" a Puig por el recorrido político que han hecho juntos y ha recordado que nunca había estado tanto tiempo en un cargo político.
El todavía síndic del principal grupo de Les Corts ha ejercido esta responsabilidad desde 2015, cuando el Botànic llegó al Gobierno de la Generalitat tras dos décadas de gobiernos del Partido Popular.