Familias españolas achacan el aumento del número de divorcios en el país --que se han incrementado un 1 por ciento en 2017-- a la salida de la crisis; consideran que evidencia un "fracaso social del país" y proponen un "endurecimiento de los procedimientos de ruptura matrimonial".
La directora general de The Family Watch, María José Olesti, ha atribuido el aumento en el número de divorcios en estos últimos años a la estabilidad económica que ha llegado en España tras la crisis.
"Muchas parejas que ahora se divorcian, en muchos casos, son separaciones que se habían postpuesto durante la época de crisis. Ahora, en una situación estable económicamente, las parejas se lanzan a romper su matrimonio", opina en declaraciones a Europa Press.
Así, ha apuntado que "paradójicamente" es la seguridad y estabilidad en lo económico la que ha favorecido que las parejas den ese paso hacia la separación. "La situación económica supone un factor clave en la toma de decisión a la hora de dar un paso tan trascendental", ha añadido.
Olesti considera que si bien en algunas ocasiones la separación es "una buena solución" para algunas parejas, "sería muy interesante dotar a éstas de herramientas para que la resolución de sus conflictos no pasen únicamente por un divorcio".
En concreto, ha propuesto la mediación o un tiempo de reflexión, para conseguir que el matrimonio no se rompa "sobre todo en los casos en los que hay hijos" y porque, a su juicio, "cuando se produce un divorcio o separación, la sociedad en su conjunto puede verse perjudicada".
Por su parte, el presidente del Foro de la Familia, Ignacio García-Juliá, ha subrayado a Europa Press que "el aumento del número de rupturas matrimoniales en España evidencia el fracaso social" de España.
"Puede parecer que un incremento del 1% respecto al año anterior es poco, pero cada matrimonio que se rompe supone un fracaso personal y para la sociedad, y nunca es gratis ni para los individuos ni para la comunidad. Hablamos de más de 102.342 rupturas, más de la mitad del número de parejas que dijeron 'sí quiero' en 2017", ha precisado.
Esta situación se agrava, a su juicio, al entender la ruptura "como una solución" a los problemas matrimoniales. "Por supuesto que hay situaciones de extrema gravedad, pero en general se recurre a la separación con demasiada ligereza", afirma. También se ha referido a los hijos "que sufren graves secuelas de este proceso".
Además, considera que existe una relación entre la tasa de divorcio y la de fecundidad pues "cuando se reduce el tiempo de convivencia se reduce el número de hijos".
DEROGAR LA LEY DEL "DIVORCIO EXPRESS"
Por ello, desde el Foro de la Familia piden "un endurecimiento de los procedimientos de ruptura matrimonial", en concreto, "que sea obligatorio acudir a un Centro de Orientación Familiar al iniciar los trámites de divorcio o separación durante un periodo mínimo" y "la derogación de la Ley del Divorcio Express".
También piensa que es "fundamental insistir en la educación" y en la "resolución de conflictos de manera dialogada" así como "cambiar los estereotipos negativos" sobre el matrimonio e implementar medidas que fomenten la conciliación y el tiempo en familia.