El
sistema de depuración de las aguas residuales de más de un
millón de habitantes de Sevilla y su área metropolitana estará
completamente renovado en 2023. Es el compromiso al que obliga la financiación europea obtenida para acometer la
renovación de los diez kilómetros del colector emisario del Puerto, la construcción de uno nuevo y la adaptación del actual y la ejecución de una nueva estación de bombeo en el Tamarguillo, con la que se triplicará la capacidad, pasando a 66 metros cúbicos por segundo. En total,
93,5 millones de euros (el 60% de fondos Feder) de inversión que supondrán la ejecución del
convenio firmado en febrero entre la
Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) y Emasesa, la empresa pública metropolitana de aguas.
Esta mejora de la red de aguas residuales es clave no sólo para la población a la que da servicio Emasesa, sino que es esencial (y obligada por la normativa europea vigente) para continuar con el
restablecimiento de las condiciones ambientales de Doñana, “la joya de la corona de Europa”, ha subrayado el
presidente de la CHG, Joaquín Páez, en el acto de presentación de las obras que afectan al colector del Puerto, con un plazo de ejecución de entre seis y 18 meses. Acto en el que ha estado presente el
alcalde de Sevilla y presidente de Emasesa, Juan Espadas.
Las
tres fases de esta actuación conjunta entre la CHG y Emasesa
cierran el círculo de una intervención integral en la red de tratamiento de las aguas residuales del área metropolitana de Sevilla por valor de 128 millones y fruto del convenio rubricado por la Junta de Andalucía y los ayuntamientos de Dos Hermanas y Sevilla. En virtud de este acuerdo, la
estación de tratamiento de aguas residuales de El Copero, en el término nazareno, se transformará y mejorará para concentrar la depuración de las aguas residuales de Sevilla y su área metropolitana, convirtiéndose en la
estación con mayor capacidad de Andalucía. En total, la modernización de toda la red de tratamiento de las aguas residuales requerirá de una
inversión de 220 millones de euros.
Para que El Copero se transforme e incorpore la tecnología más innovadora en materia de tratamiento de aguas residuales será necesario acometer el
trasvase de las aguas que actualmente llegan a las depuradoras de Tablada (cuenca oeste) y San Jerónimo (cuenca norte). Esto implicará la construcción de
nuevos colectores mediante tuneladoras. Cuando esta actuación se complete, Sevilla y su área metropolitana pasarán a
de cinco a tres depuradoras.
Tanto las obras que van a acometer CHG y Emasesa en el colector del Puerto como las que hará Emasesa con la Junta de Andalucía van encaminadas a
mejorar la eficiencia, reducir el consumo energético y a gestionar mejor los caudales de las lluvias torrenciales, cada vez más frecuentes como efecto del cambio climático.
La repercusión en el Parque Nacional de Doñana de estos trabajos de modernización se traducirá en la
eliminación de “vertidos” en la zona, donde la CHG está intensificando las acciones de
control de las aguas subterráneas, con el
sellado de pozos ilegales (170) y la clausura de otros 400 para intentar reducir el uso de los acuíferos. “
Estamos obligados a cuidar de Doñana”, ha manifestado el presidente Páez, que ha vuelto a reclamar la “implicación de todas las administraciones” en esta tarea de conservación del parque. El
alcalde Juan Espadas, por su parte, ha puesto el énfasis en el hecho de que
Emasesa, al final de este mandato,
habrá “batido todos los récord posibles de inversión” con respecto a las últimas décadas.