Una exposición que ha sido inaugurada hoy en el Museo Arqueológico de Sevilla, donde podrá visitarse hasta septiembre, explica el hallazgo, en abril pasado, del denominado tesoro de Tomares (Sevilla), localidad en la que de forma casual fueron halladas algo más de media tonelada de monedas romanas.
Las monedas, unas 50.000 de los siglos III y IV después de Cristo, fueron halladas durante unas obras en el Parque Olivar del Zaudín, y posteriormente trasladadas y depositadas en el Arqueológico sevillano, donde un grupo de expertos las clasifica y estudia desde entonces.
Todo ese proceso, desde el hallazgo casual, hasta su custodia y transporte a cargo del Seprona de la Guardia Civil, cuyos agentes han asistido esta mañana a la inauguración oficial de la muestra junto a arqueólogos y especialistas, se cuenta en la exposición a través de paneles.
La muestra incluirá hasta principios de enero, cuando serán retiradas para su estudio, cuatro ánforas de las que contenían las monedas y que aún permanecen selladas.
Las 19 ánforas que contenían el tesoro se hallaban nueve íntegras, otras tantas rotas, y una más rota y estratificada -con buena parte de las monedas fuera, amontonadas junto a la vasija-, tal y como se muestra en otra vitrina de la muestra.
También se muestran monedas ya limpias y tratadas y otras tal y como fueron halladas, para explicar el proceso de recuperación clasificación.
En una de las vitrinas hay monedas de los emperadores Dicleciano, Maximiano, Galerio y Constancio Cloro, y en otra ejemplares pertenecientes a los cinco últimos emperadores de la Tetrarquía, Licinio, Severo, Maximino, Magencio y Constantino.
Muchas de estas monedas son raras y muy cotizadas en el mercado de coleccionistas porque muchas de ellas apenas si legaron a ponerse en circulación, dada la brevedad de muchos de estos emperadores, en época de decadencia del imperio.
La exposición, que cuenta con una unidad didáctica, hace referencia también al impacto informativo que, a escala mundial, tuvo el hallazgo, que en la muestra se describe como el mayor tesoro de monedas de la antigüedad hallado en España.