Coincidiendo con el 25 aniversario de la gran catástrofe medioambiental de Aznalcóllar (Sevilla), como consecuencia de la fractura de la balsa de residuos de metales pesados del complejo minero, explotado entonces por Boliden-Andaluza de Piritas S.A. (Apirsa), la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ha defendido que recientemente ha invertido 2,3 millones de euros en tres actuaciones en el río Guadiamar, en el entorno de Doñana, para la preservación de este espacio natural.
Para la rehabilitación ambiental del río Guadiamar, una de las zonas más afectadas por la rotura hace ahora 25 años de la balsa minera de Boliden en Aznalcóllar, la CHG ha ejecutado por importe de 582.520 euros un proyecto de restauración de 2,25 kilómetros de la ribera del río y de conexión de 56 kilómetros del cauce para el paso de la ictiofauna.
Por otro lado, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir está elaborando el estudio de alternativas como paso previo a la redacción del proyecto de construcción del recrecimiento de la presa del río Agrio, con un importe de 1.316.961 euros.
El proyecto de construcción del recrecimiento de la presa del río Agrio tiene como objetivo inicial la sustitución de ocho hectómetros cúbicos de captaciones de aguas subterráneas, por aguas superficiales en la zona de los Hatos.
Y a ello se suman distintas mejoras ambientales fruto de la mayor regulación de los recursos hidráulicos, entre las que cabe subrayar que se reducen las posibilidades de avenidas que pudieran producir alivios que podrían afectar la estabilidad de los pasivos ambientales mineros del vertedero, de la balsa y de la antigua corta minera, donde en esta última se almacenaron los residuos de la limpieza del Guadiamar.
Asimismo, y para contribuir a la recuperación de la dinámica fluvial natural de la marisma de Doñana, el organismo de cuenca está redactando, según defiende, el estudio de alternativas, con un presupuesto de 339.927 euros, para la recuperación del Caño Guadiamar y, por tanto, la conexión de la marisma con el río. Esta actuación requerirá una inversión de 16 millones de euros para su ejecución.