El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha defendido que la tasa turística debe implantarse "cuanto antes" para que la ciudad pueda disponer de fondos extras con los que afrontar desde mejoras en el patrimonio y en los barrios hasta inversiones en promoción en los destinos de larga distancia (EEUU y Asia, por ejemplo), así como para "amortiguar las externalidades negativas que produce" un flujo importante de turistas en zonas del Casco Antiguo, caso del barrio Santa Cruz. "A algunos los quemaron en la hoguera por decir que la Tierra era redonda. Yo repito: la tasa turística llegará sí o sí. Cuanto antes, mejor, porque cuanto antes esté, tendremos recaudación" extra en la ciudad, al tiempo que ha apostillado que "no quiero que haya obligatoridad. Que la aplique el que quiera".
Así lo ha defendido este lunes el primer edil en declaraciones a los medios tras una reunión en torno al Plan Estratégico de Sevilla 2030 en las que ha apuntado que "cuando se abra esta posibilidad" --que depende o bien de que la Junta de Andalucía legisle sobre el particular o el Gobierno central modifique la Ley de Haciendas Locales para incluir este nuevo tipo impositivo, que recaerá en los turistas, no en los contribuyentes locales--, "hay que hacer un trabajo de consenso con el sector" que, ha reconocido, tiene un "temor". El debate se reactiva en Sevilla, de hecho, con motivo de la iniciativa que llegará el PSOE municipal al Pleno del próximo 21 de julio para instar a las administraciones autonómica y central a legislar sobre esta materia.
"Hay que quitarles de la cabeza que no se va a beneficiar el turismo de lo que se recaude. Dicho de otra manera: lo recaudado favorecerá principalmente al turismo. Esa duda --sobre el destino de esos fondos a otras políticas que no sean fundamentalmente turísticas-- habrá que quitársela", ha argumentado Muñoz. En esta línea, el alcalde ha insistido en que "está demostrado" que la implantación de una tasa turística "no disuade de la visita" a las grandes capitales que ya la tienen. "Nadie deja de ir a París, Roma o Lisboa porque exista" esta fiscalidad, ha sostenido.
"La tasa turística cuando antes, mejor. Va a llegar sí o sí porque es como una mancha de aceite que se está extendiendo por toda Europa", ha apuntado, para, a renglón seguido, puntualizar que en su ánimo no está que la aplicación sea "obligatoria". "Que la aplique el que quiera, el que tenga voluntad política. Desde luego, si yo tuviera esa oportunidad de aplicarla, lo haría", ha señalado.
En este sentido, y haciendo una simulación, ha explicado que si la tasa fuera de un euro por turista y noche en Sevilla, la ciudad ingresaría siete millones de euros extras; catorce si la tasa fuera de dos euros. "La cantidad de mejoras que podría tener la ciudad... Cada 31 de diciembre --momento del cierre del presupuesto--, pienso que hemos perdido siete millones de euros como mínimo", ha señalado. En cualquier caso, en este momento, y ante el "compendio de posibilidades que hay" en torno a la tasa --en función de la categoría del establecimiento hotelero y bonificaciones por familia y número de noches, por ejemplo--, la ciudad no tiene definido un modelo concreto.
"En este momento, no está estudiado de manera pormenorizada, entre otras cuestiones, porque lo importante es que se abra la puerta" por parte de la Junta o del Gobierno de la Nación. En cualquier caso, el alcalde de Sevilla ha defendido que la "coyuntura" es la "más favorable", ya que tanto es inminente la formación de un nuevo gobierno andaluz tras las elecciones del 19 de junio como el Gobierno de España "está abriendo la posibilidad de una nueva fiscalidad". Es el momento, ha abundado Muñoz, para "poner la fiscalidad turística encima de la mesa".