32 años se cumplían este martes, 2 de julio, de la muerte de Camarón de La Isla y sus paisanos no faltaron a la cita. Miles de personas se dieron cita en la Plaza del Rey para presenciar un espectáculo a la altura del mito.
Fue una noche brillantes, de junteras y con la figura de José Monge siempre presente, como la leyenda que lucía en el centro del Ayuntamiento en la que se podía leer Leyenda Camarón.
Y los primeros en llenar el escenario y formar la pelotera fueron Antonio Lizana y Pedro El Granaíno, tanto monta, monta tanto. Dos camaroneros de pro que han bebido y siguen bebiendo de su fuente.
Durante 50 minutos y acompañados de un importante elenco de artistas de la tierra llegaron al corazón de las miles de personas que a esa hora se daban cita en la céntrica plaza isleña. Ovación cerrada por tan magnífico espectáculo en el que los dos combinaron a las mil maravillas y se los noto en la cara, en cada gesto.
Y si la primera parte fue buena, la segunda no se quedó atrás con el revuelo que firmaron Kiko Veneno y compañía.
Kiko Veneno abrió el camino de la juerga flamenca que se montón para recordar a Camarón y lo hizo interpretando
La Leyenda del tiempo. Y el resto fue un recital con los temas más reconocibles de
El Canijo de Jerez en su etapa de
Los delincuentes,
Tomasito formando el taco con si estilo inconfundible a la hora de bailar y junto a ellos Diego Pozo y
Muchachito Bombo infierno..., en definitiva, más de dos horas de un tributo de los que será recordado por mucho tiempo.