“Chanel era más que simplemente una simpatizante y colaboradora de los nazis. Era una agente numerada de los nazis que trabajaba para la Abwehr, la agencia de inteligencia militar alemana”, asegura la editorial Knopf en un comunicado con motivo de la salida al mercado estadounidense del nuevo libro sobre la diseñadora.
Durmiendo con el enemigo: La guerra secreta de Coco Chanel, escrito por el periodista estadounidense Hal Vaughan, ofrece detalles de la conexión de la modista francesa con los nazis, entre ellos su supuesto número de agente para la Abwehr, el F-7124, y su alias, Wesminster.
A raíz del análisis de archivos en el Reino Unido, Alemania, Francia y Estados Unidos, el periodista, que luchó por su parte para el ejército estadounidense en la Segunda Guerra Mundial, desvela “por primera vez documentos que detallan las extensas actividades de Chanel durante la guerra”, dijo la editorial.
Según esas averiguaciones, la emblemática diseñadora francesa habría realizado misiones para el servicio de inteligencia nazi en Madrid y Berlín durante la Segunda Guerra Mundial junto a su amante, el oficial Hans Gunter von Dinklage, algunas de ellas en nombre del general de las SS Walter Schellenberg, mano derecha del comandante en jefe de ese cuerpo, Heinrich Luitpold Himmler.
El comunicado de la editorial asegura que esta nueva biografía revela de dónde provenía el antisemitismo de la diseñadora, por qué estaba “tan arraigado en ella”, y cómo fue reclutada para pertenecer al cuerpo de inteligencia de los nazis. Además, el libro explica cómo Coco Chanel utilizó su posición de espía nazi para recibir favores, como asegurar la liberación de su sobrino de un campo de internamiento militar o “arrebatarle” el control de su marca de perfumes a sus socios judíos, que se tuvieron que exiliar en Estados Unidos durante la guerra.
La biografía, que según la editorial “revela la historia al completo, negada y encubierta durante seis décadas, de la colaboración de Coco Chanel con altos mandos nazis”, detalla además cómo la reina de la moda consiguió escapar de la muerte cuando fue detenida y liberada posteriormente en París.
La icónica diseñadora, que ha protagonizado numerosas biografías y películas, murió en 1971 en París.