El fallo ha sido dictado después de que el pasado 16 de enero un jurado popular declarara a Rafael R.M. culpable del crimen, ocurrido el 7 de febrero de 2018
La Audiencia de Granada ha condenado a quince años de prisión por un delito de homicidio y otro de tenencia ilícita de armas al hombre juzgado por matar en Santa Fe (Granada) a un joven de 24 años con quien tenía desavenencias previas y al que disparó con un arma para la que carecía de licencia.
Este fallo, al que ha tenido acceso Efe este sábado, ha sido dictado después de que el pasado 16 de enero un jurado popular declarara a Rafael R.M. culpable del crimen, ocurrido el 7 de febrero de 2018.
La sentencia, contra la que cabe recurso de apelación, ha condenado al procesado a 14 años de prisión por el delito de homicidio, con la circunstancia agravante de abuso de superioridad, y a otro año más de cárcel por el de tenencia ilícita de armas.
El procesado, Rafael R.M., se enfrentaba a una petición fiscal definitiva de 21 años y 10 meses de prisión por asesinato y tenencia ilícita de armas, los mismos delitos que le atribuía la acusación particular, que pedía para él 27 años de cárcel, mientras que la defensa interesaba su libre absolución.
El Ministerio Público también planteó como alternativa que el acusado pudiera ser condenado de forma alternativa por homicidio, por el que le solicitó 14 años de prisión, más diez meses por la tenencia del arma, según informaron a Efe fuentes del caso.
Rafael R. M. negó durante el juicio haber asesinado de un disparo al joven y aseguró ante el jurado que algunos testigos lo habían acusado como el autor "por miedo a lo que les pueda pasar".
"Lo he negado siempre. Si no lo he hecho cómo voy a admitirlo", sentenció el acusado, que sostuvo que se encontró con el joven, que era amigo suyo y con el que había tenido buena relación hasta que este le robó unos 5.000 euros, en un entorno cercano a su vivienda en Santa Fe (Granada).
"Le dije me has robado, te he perdonado y vienes a vender droga a mi propio barrio", declaró Rafael, quien relató que, en un determinado momento, al parecer la víctima "se puso en actitud chulesca" e intentó sacar algo que parecía una pistola, por lo que el acusado decidió echar a correr hacia su casa.