La propuesta de los sindicatos, que contempla todo el territorio nacional y todos los medios de transporte -aéreo, ferroviario, marítimo y por carretera-, se basa en la orden ministerial de 2002 del entonces ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos, según han explicado hoy los secretarios de Organización de CCOO y UGT, Antonio del Campo y José Javier Cubillo, respectivamente.
Los servicios esenciales para la jornada de huelga se han planteado de manera global e intermodal, teniendo en cuenta el conjunto de los medios de transporte existentes, para evitar duplicidades y con el objetivo último de garantizar tanto el derecho de huelga de los trabajadores como el derecho a la movilidad de los ciudadanos.
Es precisamente lo que ha pedido hoy el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, que abogó para que el próximo 29 de septiembre se pueda "conciliar" el derecho a la huelga con el derecho a la movilidad y al trabajo, y ha insistido en que la movilización convocada por los sindicatos no cambiará la reforma laboral, que es "absolutamente imprescindible y necesaria".
El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha discrepado de esa opinión, al afirmar hoy que la reforma laboral sigue siendo "reversible" y que la huelga general del día 29 será "masiva".
A su juicio, las huelgas "siempre han tenido efectos" y ésta "no va a ser una excepción".
Desde el punto de vista de CCOO y UGT, la propuesta de servicios mínimos cuenta con grandes posibilidades de acuerdo en la medida que está basada en la citada orden ministerial, aunque en aquella ocasión no fue posible el acuerdo.
De hecho, fue la petición de paralizar los vuelos internacionales la que impidió un acuerdo, aunque unos años más tarde recibió la aprobación de los tribunales.
El secretario general de la Federación Estatal de Transportes de UGT, Comunicaciones y Mar, Miguel Ángel Cillero, hizo hincapié en que la intención de los sindicatos es, en principio, el acuerdo, por lo que criticó que la patronal está solicitando de antemano la intervención de las fuerzas públicas.
La propuesta de servicios mínimos ha sido recibida por Fomento en un clima de "cordialidad" y se ha fijado para mañana por la tarde la reunión entre el Ministerio y los sindicatos para analizarla.
En cuanto al transporte aéreo, se contempla mantener los vuelos nacionales en la cuantía de un vuelo por trayecto de ida y vuelta en los servicios que conecten entre si los principales aeropuertos nacionales y cuya distancia supere los 500 kilómetros.
Entre la península y las islas, así como Melilla, se propone mantener un vuelo por trayecto de ida y vuelta, al igual que en los servicios regulares interinsualres programados para el día de la huelga.
También se aceptarán los vuelos intercontinentales de llegada al territorio nacional que hayan despegado antes de las 00.00 horas locales de España el día de la huelga.
Los sobrevuelos previstos normalmente habrán de variar su plan de vuelo para evitar el espacio aéreo español.
Respecto al transporte ferroviario, los sindicatos pretenden que sólo funcione el 25% de los trenes de cercanías y del metro y que se evite los servicios mínimos impuestos para la huelga del suburbano madrileño en verano que los sindicatos consideran "abusivos".
El 25% en cercanías y metro sólo se aplicaría durante la hora punta, cuando habría un tren cada 30 minutos, entre las seis y las nueve de la mañana y entre las cinco y las ocho de la tarde.
En cambio, no circularían trenes de largo recorrido y todas sus relaciones nocturnas estarían dispuestas en origen para efectuar su salida, de forma inmediata, después de las 24,00 horas del día de la huelga.
En caso del transporte de viajeros por carretera, los sindicatos piden que no se preste servicio en las líneas que coincidan con otros modos de transporte, mientras que en las no coincidentes, se propone la circulación de entre uno y tres servicios de cabecera a final de línea y viceversa, en función del número de servicios diarios habituales.
El documento incluye, asimismo, el transporte marítimo, donde se propone servicios mínimos entre la Península y las islas y Melilla.
CCOO y UGT proponen también que los transportes que atiendan las necesidades de hospitales u otras instalaciones sanitarias tendrán consideración prioritaria, por lo que se garantizarán los servicios mínimos de ambulancias, transporte de medicinas y elementos urgentes que sean necesarios para garantizar la vida, la salud y la seguridad de las personas.