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El PSOE saca adelante la reforma

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  • El ministro de trabajo, Celestino Corbacho. -
  • PP y CiU confirman su abstención
  • Antonio Gutiérrez, diputado del PSOE y ex secretario general de CCOO, no avala la reforma
El Pleno del Congreso de los Diputados convalidó con el único voto a favor del PSOE el Decreto Ley de reforma laboral aprobado hace una semana por el Gobierno, dando así el pistoletazo de salida a la tramitación urgente de una norma que los socialistas afrontan sin apoyos claros que le permitan evitar cambios sustanciales en su contenido.

La Cámara Baja convalidóla norma, si bien el PSOE no ha logrado aún el apoyo explícito por parte de ninguna de las formaciones de la oposición y confía en recibir al menos una "abstención crítica" por parte de PP, CiU, PNV, Coalición Canaria y UPN, frente al voto en contra de las minorías de la izquierda parlamentaria y UPyD.

En cualquier caso, los socialistas siguen a la espera de que los 'populares' y la federación catalana confirmen el sentido de su voto, algo que estas dos formaciones quieren retrasar hasta inmediatamente antes del debate para apurar el margen de negociación con el Gobierno.

Mientras que ERC, pese a las negociaciones mantenidas con Corbacho en las últimas dos semanas, no contempla votar a favor de la norma y se debate entre la abstención y sumarse al rechazo de sus compañeros de grupos parlamentario, IU e ICV, así como de las formaciones adscritas al Grupo Mixto de la Cámara Baja, BNG, Nafarroa Bai y UPyD.

En este sentido, el secretario general de ERC, Joan Ridao, reclamó garantías de que se "equilibrará" el decreto antes de hoy por la tarde a cambio de que la formación republicana pase de votar 'no' a abstenerse en el Congreso.

Al Senado
Salvado el trámite de convalidación, la previsión del Grupo Socialista es aprovechar el mes de julio para acelerar al máximo el proceso, una idea que PP, CiU y PNV están dispuestos a facilitar, con lo que se sumaría la mayoría de votos suficiente en la Junta de Portavoces de la Cámara Baja para diseñar el calendario extraordinario para la Comisión de Trabajo e Inmigración.

La previsión que se maneja en el Congreso es que la primera fase del debate, en Ponencia y Comisión, se prolongue hasta finales de julio, ya que entre medias se celebrará el Debate sobre el estado de la Nación, con un Pleno extraordinario a finales de mes para debatir las enmiendas a la norma, que pasaría a continuación a debatirse en el Senado a lo largo de agosto.

Los socialistas confían en lograr un acuerdo que impida cambios sustanciales en el decreto, que ya ha entrado en vigor, a cambio de aceptar modificaciones en aspectos que no quedan explicitados en la norma original, como las condiciones que permiten a las empresas acogerse al despido de 20 días por indemnización y diversos aspectos relativos a la flexibilización de la negociación colectiva.

La alternativa del PP
Sin embargo, los grupos no renuncian a entrar más en profundidad en otros aspectos de la norma, en especial el PP, cuyo equipo económico, que lidera Cristóbal Montoro, ha estado examinado exhaustivamente en los últimos días para presentar una alternativa en materias relacionadas también en materia de temporalidad y bonificaciones.

Estas últimas suponen la mayor parte (471 millones de euros) de los 740,5 millones de euros que tendrá la reforma, según las estimaciones del Gobierno, a las que tuvo acceso Europa Press. La reforma propiciará la firma de 2,37 millones de nuevos contratos indefinidos, de los que el 1,33 millones, el 56%, corresponderán a la modalidad de fomento de la contratación indefinida con 33 días por indemnización en 2010 y 2011.

En esos dos años, el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) abonará 123,62 millones correspondiente al pago de ocho días de indemnización por despido en todos los contratos indefinidos que se extingan, que ascenderían a 179.145 despidos.

PP y CiU
Los portavoces del Grupo Popular y CiU en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, y Josep Antoni Duran i Lleida, respectivamente, han confirmado este mediodía que sus grupos se abstendrán esta tarde en la votación para convalidar el decreto ley de reforma laboral.

De esta forma, la reforma se aprobará previsiblemente sólo con los votos a favor del PSOE, ya que tanto el PNV como Coalición Canaria, UPyD y UPN se abstendrán, mientras que ERC, IU-ICV, BNG y Nafarroa Bai votarán en contra.

En concreto, según explicó Sáenz de Santamaría la posición del PP se fundamenta en la coherencia, pero con sentido crítico. A su juicio, es necesaria una reforma laboral pero la presentada por el Gobierno no es la que necesita España. "Se necesita una reforma laboral completa y meditada para crear empleo y la del Gobierno no lo hace", zanjó.

Sáenz de Santamaría insistió en la necesidad de mejorar el decreto del Gobierno y explicó, el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, llamó a las once de la noche de ayer al responsable económico del PP, Cristóbal Montoro, pero no para negociar, sino sólo "para interesarse por el sentido de voto del PP".

Por su parte, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, confirmó que su formación se abstendrá en la votación y que presentará enmiendas durante su tramitación como proyecto de ley para mejorar un texto a su juicio "insuficiente".

En la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces, Duran explicó que los nacionalistas catalanes se han decantado finalmente por la abstención, pese a que era la única opción que había descartado inicialmente, a la vista de que el Gobierno asumió como "imprescindible" tramitar la reforma como proyecto de ley.

Será entonces cuando CiU, según apuntó, aproveche para enmendar un decreto en el que, recalcó, ha habido una serie de variaciones sobre el documento inicial que se presentó a sindicatos y patronal que su formación comparte. El voto final de los nacionalistas catalanes dependerá de los cambios que se introduzcan durante el trámite parlamentario.

Liberarse de los convenios
De entrada, Duran ya avanzó algunos campos en los que CiU buscará cambios. Así, quiere que se permita a algunas empresas, en función de su tamaño o su situación, "descolgarse" de los convenios territoriales o sectoriales negociados, así como incluir medidas que impulsen la contratación a tiempo parcial y que regulen el teletrabajo.

Igualmente, CiU apostará por medidas para combatir el absentismo laboral y para ligar el subsidio de desempleo a las políticas activas de formación. En el tema autonómico, pedirán que se devuelva a las comunidades la competencia de la inspección y sanciones a los parados.

Las enmiendas, que aún no están redactadas, abarcarán también otros aspectos y, una vez conocidas, CiU marcará sus "líneas rojas" para el acuerdo. El resultado final del diálogo `parlamentario determinará si la reforma acaba teniendo o no el voto a favor de los nacionalistas catalanes.

ERC, en contra
En este marco, el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao, ha avanzado que los tres diputados de su formación votarán esta tarde en contra de la convalidación del decreto ley sobre la reforma laboral, pese a que hasta ayer mismo estaban en una posición de abstención.

A su juicio, en sólo dos días el Gobierno ha hecho "el trabajo sucio" a la derecha y a la patronal optando por "una contrarreforma" que "facilita y abarata el despido", amplía la precariedad laboral y "no da oxígeno a la negociación colectiva".

En una rueda de prensa en la Cámara Baja, el también secretario general de ERC recordó que su formación consideraba el primer documento del Gobierno una propuesta "estimable" que "no estaba mal", "un punto de partida razonable, aunque lleno de incógnitas", pero lamentó que el Ejecutivo no haya compartido su "afán constructivo" y no haya aceptado potenciar la entrada en el mercado de trabajo, en lugar de facilitar el despido.

A su juicio, "en dos días" el Gobierno ha hecho lo que no había hecho en dos años y "ha quemado el embrague de tanto ir marcha atrás". Según explicó, el resultado final es una reforma que llega tarde y mal": "El Gobierno ha hecho el trabajo sucio a las patronales y a la derecha", resumió.

Un histórico
El diputado socialista y ex secretario general de Comisiones Obreras (CC.OO.), Antonio Gutiérrez, se ha negado a confirmar su voto a favor de la convalidación del decreto de reforma laboral que se vota esta tarde en el Pleno del Congreso y que su grupo respalda.

En declaraciones en los pasillos del Congreso, Gutiérrez admitió que tiene una "discrepancia puntual muy importante" con el Gobierno --"me duele tener esta discrepancia", llegó a decir--, si bien quiso dejar claro "por encima de todo" sigue pensando que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero es "el mejor" para hacer frente a la crisis.

"Es el que ha hecho el mayor esfuerzo de cuantos gobiernos anteriores han tenido crisis, incluso muchísimo más leves que ésta, el que ha demostrado más sentido de la justicia social que ninguno y también inteligencia para mantener la demanda interna ayudando a las gentes más humildes", adujo.

Preguntado en varias ocasiones si esa diferencia puntual que mantiene con el PSOE sobre la reforma laboral significa que votará en contra o que se abstendrá, Gutiérrez no lo negó y evitó contestar abiertamente, recalcando que el Grupo Socialista ya ha sido informado de su posición.

A alguien se le ha ido la mano
Aunque el ex dirigente sindical dijo creer que el contenido de la reforma del mercado de trabajo se ha hecho "con el mejor ánimo y con buena fe" buscando inicialmente "un equilibrio", al final, según criticó, se han acabado "desequilibrando" las cosas "a favor de aquellos que buscan aligerar plantillas y facilitar el despido, en vez de flexibilizarlas y modernizarlas". "A alguien ahí se le ha ido la mano", apostilló.

A su juicio, éste es "el gran problema" de España "desde muchísimo tiempo: la tensión de quienes, antes una crisis, hemos querido aprovecharla para reformar lo que sea necesario con cabeza y pensando en un desarrollo industrial mucho más solvente, y los que quieren volver a recomponer el beneficio muy rápidamente a costa de degradar el empleo". Y eso, según indicó, acabará degradando también toda la economía del país, su desarrollo y su posición competitiva en Europa y en el mundo.

Respalda la huelga
Preguntado sobre si respalda la huelga que los sindicatos han convocado para el próximo 29 de septiembre en contra de la reforma laboral, Gutiérrez respondió afirmativamente, tras lo cual subrayó que cualquier huelga es "siempre la expresión de un fracaso y que "siempre es deseable" evitarla.

Isabel López i Chamosa, diputada del PSOE, que se mostró segura de que "todos" los socialistas van a votar esta tarde a favor del decreto, fue preguntada a continuación por la posición contraria de Gutierrez: "Respeto su opinión pero creo que se equivoca", zanjó.

Dicho esto, defendió que la reforma laboral que plantea el Ejecutivo Zapatero es "necesaria" y que "lo único que hay que hacer" es introducir aquellos ajustes que correspondan durante la tramitación como proyecto de ley.



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