Uno de los 19 acusados no será juzgado al haber sido declarado inimputable por haber sufrido un accidente recientemente, han informado fuentes jurídicas.
Antes del inicio del juicio, la defensa solicitó la nulidad de las intervenciones telefónicas practicadas por la Policía a algunos de los acusados para demostrar la tenencia ilícita de armas, al considerar que dichas escuchas eran “ilegales”. Sin embargo, la petición de la defensa ha sido rechaza por el tribunal.
Los acusados, presuntos integrantes del grupo neonazi Blood and Honour España (Sangre y Honor), se enfrentan a penas de entre dos y cinco años de prisión por los delitos de tenencia ilícita de armas y de asociación ilícita al considerarse que este grupo incita al odio.