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Sevilla

El valor catastral de la Tablada “urbanizable” no llega al millón

La superficie que aparece en el Catastro atribuible a las inmobiliarias es de 346 hectáreas en números redondos

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  • Plano de Tablada, en azul las parcelas de las inmobiliarias. -
  • Las doce parcelas están muy fragmentadas y sus propietarios son los mismos
  • Hay terrenos propiedad del Ministerio de Defensa y también del Ayuntamiento a través de Emasesa y Lipasam
  • El coste de mantenimiento del parque podría reducirse al medio millón de euros

El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, quiso zanjar el jueves, al menos temporalmente, la polémica sobre la recalificación de los terrenos de la dehesa de Tablada, a la que sigue atribuyéndole 700 hectáreas, asegurando que “no hay proyecto”, pero lo cierto es que la Agrupación de Interés Económico Tablada Híspalis, que agrupa a las inmobiliarias que hace dos décadas adquirieron esos terrenos con intención de urbanizar en ellas, sigue siendo la propietaria de al menos 346 hectáreas y en estos momentos el valor catastral de esos suelos no alcanza ni el millón de euros, estando clasificados como rústicos, con un uso principal agrario.

Según el Catastro, los suelos englobables dentro de la unidad territorial conocida como Tablada se dividen en numerosas parcelas catastrales, de las que una docena pertenecen a empresas del sector inmobiliario y en las fichas catastrales, a la hora de definir los cultivos o aprovechamientos existentes en esa docena de parcelas aparecen los términos “pastos, improductivos y labor o labradío/regadío”.

Las parcelas del pool


Para la Dirección General del Catastro, dependiente del Ministerio de Hacienda, en conjunto los 3.459.123 metros cuadrados, es decir, 345,9 hectáreas, que atribuye al pool de empresas inmobiliarias de la AIE Tablada Híspalis tienen un valor de 804.280,89 euros.

Las doce parcelas de titularidad empresarial están muy fragmentadas, ya que se dividen en 63 subparcelas, repartidas entre 122 propietarios, lo cual no significa que sean 122 diferentes, ya que la inmensa mayoría de los mismos (aparecen hasta trece distintos) comparten, en porcentajes variables, la titularidad de las parcelas, salvo en dos de ellas, que tienen un único dueño.

Según la investigación realizada por Manuel J. Florencio, el Catastro atribuye aún el 0,89% de sendas parcelas a dos organismos del Ministerio de Defensa, un “vecino indeseado” por las empresas, que intentaron hace años devolverle todos los terrenos que adquirieron a una filial de las Cajas de Ahorro sevillanas previa subasta de los mismos por los militares, al ver frustradas sus expectativas y la posterior declaración judicial de que una franja de 200 metros de anchura debía adscribirse al Dominio Público Marítimo Terrestre.

Ese intento de las inmobiliarias de revertirle los terrenos a Defensa y de que el Ministerio a su vez les devolviera el dinero pagado por ellos, más una indemnización y los intereses legales fracasó ante la Audiencia Nacional.

Los organismos ministeriales a los que el Catastro aún reconoce una pequeña participación en la propiedad de Tablada son la Gerencia de Infraestructura y Equipamientos de la Defensa y el Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (Invied).

También municipales

Además de estas parcelas, el Catastro atribuye a Emasesa, empresa metropolitana de aguas con mayoría de capital social del Ayuntamiento de Sevilla, la propiedad de dos parcelas situadas en la mitad Sur de esta gran península, la zona que aún ha quedado al margen del apetito de las grandes inmobiliarias, con una sola excepción: Una sociedad agrícola, Crespo Camino, es la dueña del 82% de la superficie parcelaria cuyos titulares se han podido identificar en la investigación.

La Corporación Municipal hispalense no sólo está presente en Tablada a través de su principal sociedad instrumental, Emasesa, sino también por sí mismo y por medio de Lipasam, según la identificación de propietarios colindantes de otras parcelas (no necesariamente con las de la empresa de aguas) que refleja la Dirección General del Catastro, aunque los datos catastrales aún están sin identificar.

Lo curioso en el caso de Emasesa, que tiene construidas al menos 22 instalaciones en Tablada, es que en una de las parcelas el Catastro le atribuye usos agrarios, cuando en realidad se trataría de los depósitos de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) Tablada y sus construcciones anejas. Justamente por la existencia de este complejo, las parcelas de Emasesa tienen una mayor valoración catastral, superior al millón de euros.

Los otros propietarios

Otro propietario industrial es Exolum, la antigua Corporación Logística de Hidrocarburos (CLH), que aparece con una minúscula parcela de 55 metros cuadrados.

El mayor propietario de todos es la sociedad agrícola Crespo Camino, con el 82% de las 231 hectáreas identificadas en los registros del Catastro para la zona Sur: 1.898.386 metros cuadrados. La valoración catastral también es la mayor de todas, casi 2 millones de euros, debido fundamentalmente a que tiene construidas 15 instalaciones, con un total de 6.900 metros cuadrados. El Catastro califica sus suelos como de labor o labradío/regadío, agrios en regadío, árboles de ribera e improductivos.

Drag Inversiones, con 107.662 metros cuadrados, es la excepción que confirma la regla, ya que se dedicaría también a la promoción inmobiliaria, si bien en el año 2020 obtuvo del Gobierno de España un contrato por valor de 350.000 euros para el suministro de mascarillas tipo KN95 con motivo de la pandemia, ya que también se habría dedicado al comercio de textiles al por mayor y al almacenamiento, comercialización y mediación de toda clase de producto sanitarios.

Particular relevancia tiene que en la lista de propietarios de Tablada aparezca el Ministerio para la Transición Ecológica, con 91.262 metros cuadrados, departamento que sería parte directamente interesada, cuando no afectada, en cualquier procedimiento administrativo que abriera el Ayuntamiento de Sevilla y/o la Junta de Andalucía para tratar de cambiar el estatus actual de la antigua dehesa y del que además depende la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, la cual tendría que elaborar/informar un estudio de impacto ambiental.

El coste del parque podría reducirse al medio millón

El mantenimiento del coste de un parque periurbano o metropolitano en la zona de Tablada, admitiendo que se extendiera hasta las 700 hectáreas de las que habla el alcalde de Sevilla, no alcanzaría los 49 millones de euros que cifró José Luis Sanz en el Pleno del jueves si se coge de modelo el del Parque del Alamillo, sino 9,82 millones, pero se reduciría a menos de medio millón si se reproduce el de Los Touruños, también gestionado por la Junta de Andalucía.

El Parque del Alamillo posee 120 hectáreas, lo que implicaría que Tablada sería 5,83 veces más y no siete como aseguró Sanz, y el coste del mantenimiento del espacio, según el último contrato licitado entre 2020 y 2021 en tres lotes diferentes, es de 1,59 millones al año, por lo que al multiplicar por esas 700 hipotéticas hectáreas totales, el coste global al año sería de 9,28 millones.

Además, la gestión sería más rentable si se utiliza el modelo del parque metropolitano Marismas de Los Touruños y Pinar de la Algaida que aplica también la Junta de Andalucía, un espacio de más de mil hectáreas, un 30% más que Tablada, y al que se destinan 1,32 millones al año, por lo que si se extrapolan estos datos, el coste anual sería de 464.604 euros y la zona estaría a las puertas de Doñana, como recuerda Manuel J. Florencio en su blog.

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