El segundo partido se jugará en el campo de la Bazán, el sábado 29 o el domingo 30
Ya se conocen las fechas de la eliminatoria que enfrentará al San Fernando CD y al Utrera en busca de una plaza en Tercera División. El sorteo realizado ayer por la mañana en la Federación Andaluza de Fútbol decidió que el choque de ida se dispute en tierras sevillanas, concretamente el próximo domingo 23, a partir de las 12.00 horas en el estadio San Juan Bosco. Por otra parte, el choque de vuelta sigue abierto, pero se jugará el sábado 29 o domingo 30 de mayo en el campo de la Bazán. Quizás el sorteo no haya sido muy del gusto de los azulinos, ya que, conociendo el juego que practica Juan Antonio Sánchez Franzón, habría sido mejor disputar el primer partido en casa para intentar sentenciar la eliminatoria a las primeras de cambio, en lugar de encadenar dos encuentros lejos de La Isla.
Ambos equipos han finalizado segundos de sus grupos de Primera Andaluza y ahora se jugarán el subcampeonato definitivo, esperando que alguna plaza vacante en Tercera les permita ascender de categoría y militar en ella la próxima temporada. Grandes temporadas las que han protagonizado los dos, por lo que el respeto mutuo marcará los dos partidos que deben afrontar. Respeto que ya puede verse en la página web oficial del equipo utrerano, que califica de “todopoderoso” al bloque de Juan Antonio.
El entrenador del San Fernando ya ha podido presenciar en directo algunos partidos del equipo sevillano durante la actual temporada, estudiando de forma muy profesional a un posible rival en la lucha por el ascenso, como así será finalmente. Para el técnico del equipo azulino, el Utrera “puede ser un rival bastante propicio por nuestra forma de jugar, ya que es un equipo que no se encierra y de los que le gusta jugar el fútbol”. Sin duda, si los utreranos no cambian de forma radical su planteamiento, saldrán a buscar la portería contraria y no a especular con el marcador y el tiempo, algo que, en condiciones normales, beneficiará el juego de toque del San Fernando, que tantas alegrías ha dado a la afición en lo que va de temporada. De hecho, cuando más han sufrido los futbolistas isleños ha sido cuando se han tenido que jugar los cuartos contra equipos netamente defensivos y que sólo pensaban en mantener el empate sin goles inicial.
Esta característica principal del juego sevillano hace que tanto el cuerpo técnico como la plantilla azulina alberguen serias esperanzas de cara a la eliminatoria de ascenso a Tercera División.