Combatió con el Dáesh en Siria durante tres años y, una vez en Europa, realizó labores de financiación y apoyo logístico a la organización terrorista
La Audiencia Nacional juzga hoy a un yihadista danés que combatió con el Dáesh en Siria durante tres años y que, una vez en Europa, realizó labores de financiación y apoyo logístico a la organización terrorista, además de difundir y "glorificar sus postulados, sus líderes y sus acciones criminales".
La Fiscalía solicita para el acusado, Ahmed Samsam, alias Abu Bakr o Syri, de 29 años y condenado en Dinamarca en múltiples ocasiones, una pena de 7 años de prisión y 6 años de libertad vigilada por un delito de integración en organización terrorista.
Con solo 22 años, Ahmed Samsam, que fue detenido en Estepona (Málaga) en junio de 2017, viajó a Siria, donde estuvo desde 2012 a 2015 combatiendo en las filas de organizaciones terroristas como el Dáesh, con quien participó en batallas "cruciales" como la toma del aeropuerto de la ciudad de Raqqa en agosto de 2014.
En su escrito de acusación, la Fiscalía constata la pertenencia del acusado en el Dáesh y la "total interiorización" del ideario yihadista, así como "su predisposición a colaborar desde dentro y muy activamente con la organización de muy diversas y significativas formas", desde luchar en el campo de batalla, hasta colaborar en la financiación del Estado Islámico.
De hecho, se han confirmado tres intentos de entregas de dinero a miembros de la organización terrorista, además de diversas gestiones para facilitar a los denominados "foreign fighters" (combatientes extranjeros) "información sobre disponibilidad y precios de drones" y material militar como chalecos antibalas u otros utensilios policiales.
Con una "sólida formación en el uso de armas", Ahmed Samsam también mostró su "plena adhesión" a las premisas del Dáesh en redes sociales como Youtube, donde compartió "un arsenal de vídeos" de "alto contenido violento y elevado potencial captador" que constituyen "una loa encendida de los asesinatos masivos de infieles y apóstatas como forma de implantar la sharia (ley islámica)".
A su vez, en Facebook vertía amenazas contra personas a las que acusaba de haberle difamado, a quienes decía que "ejecutaría al modo y manera característicos del Dáesh, mencionando específicamente que los decapitaría".
Desde su móvil, en el que se encontraron 5.565 vídeos y 22.653 imágenes, el acusado difundía "imágenes extremadamente violentas" y manifestaba su satisfacción de poder "expandir" lo que él consideraba como "la única verdad".