Más de una semana después del terremoto apenas quedan esperanzas de encontrar a personas con vida entre los escombros. Ahora la prioridad es atender a los miles de heridos y a las personas que lo han perdido todo. Desde que Turquía y Siria activaron la petición de ayuda humanitaria, los malagueños no han parado de trabajar movidos por la “ilusión” de aportar, todo lo que está en sus manos, para que esta situación sea algo menos dura.

La Agrupación de Desarrollo de Voluntariado de Respuesta Rápida, con más de 600 voluntarios, coordina la avalancha de material que se está recopilando. Entidades, asociaciones, colegios, comercios y supermercados suman más de 80 puntos repartidos de recogida por toda la provincia. “Hace muchísima falta”, lamenta Miguel López, secretario de la Asociación de vecinos ‘La Unidad’, mientras deja unos pañales en la zona punto habilitada por la entidad a la que pertenece: “Es lo primero que he encontrado, ahora con más tiempo miraremos más cosas que podemos donar”.

Desde los 80 puntos establecidos llegan todos los días hasta la Agrupación camiones repletos de los materiales que las “contrapartes de allí nos están solicitando”: “Necesitamos material sanitario y de cura, alimentos no perecederos que no estén en botes de cristal y que no contengan cerdo, mantas, tiendas de campaña, aislantes”, explica a Viva Málaga Antonio Paneque, coordinador de la campaña.

En Campanillas han hecho una campaña de recogida “bastante agresiva en muy corto espacio de tiempo”, Juan arrabal, ayudante en este distrito de la capital malagueña, cuenta que han sido “muchos” los vecinos que se “han desplazado” para contribuir. Por ejemplo, los “mayores de Campanillas han hecho una recolecta propia en su hogar de mayores, también los colegios y los compañeros de otras asociaciones, como una asociación de adopción y rescate de perros potencialmente peligrosos que llevan unos chavales muy jóvenes”. En unos tres “escasos” días, pero “muy intensos”, han reunido entre 3.000 y 4.000 kilos alimentos, medicamentos y ropa.

Campanillas es “solidaria” y “está por y para cuando se requiere”, al igual que Bailén-Miraflores. En el barrio de Nueva Málaga tienen tres puntos de recogida. En horario de mañana en la Asociación de vecinos ‘La Unidad’, detalla su presidente, José del Castillo. Desde esta entidad movilizaron al resto de organizaciones de la zona: “Fue el sábado y el mismo sábado por la tarde tenía prácticamente la contestación con el sí de todos”. Tras el visto bueno de las diferentes entidades y centros educativos y deportivos se coordinaron con Paneque para las entregas. Los otros dos puntos de recogido son en horario de tarde, en la Peña Nueva Málaga y en el campo de fútbol La Unidad.

El material llegará a Turquía y Siria por vía marítima, en contenedores gigantes de 40 Dry. Se ha optado por este transporte por su gran capacidad, ya que en el primero envío se mandarán 30 toneladas, “gracias a la solidaridad de tantísima gente”, indica Paneque. Lo han gestionado gracias a la colaboración de la Asociación siria Palmira de Málaga, por la “imposibilidad de enviar la ayuda a través de la Embajada de Turquía, que en este momento tiene un pequeño colapso”. Se espera que el contendor salga la semana que viene, pero “estamos aún pendientes de que la empresa marítima confirme el día de la carga”. Por la “dramática” situación que se vive en ambos países, prevén la entrega de “dos o tres más”.

El material procede en su gran mayoría de la provincia de Málaga, pero también hay medicamentos, ropa y alimentos que han llegado desde otras capitales de Andalucía y fuera de la comunidad, detalla el coordinador. Málaga “como siempre” es un ejemplo de “solidaridad”, porque “siempre ha dejado el listón muy alto en cada una de estas iniciativas”.