El presidente de la asociación de importadores de automóviles (Aniacam), Germán López Madrid, mostró su escepticismo con la reforma financiera como impulsora instantánea del crédito al consumo.
En las jornadas anuales de Volvo España en la localidad gaditana de Jerez de la Frontera, filial del fabricante sueco que también preside López Madrid, éste indicó que la reforma laboral tampoco servirá para una creación rápida del empleo que genere confianza entre los ciudadanos y que pueda ayudar a cambiar la tendencia del consumo.
López Madrid dijo que "el empleo lo promocionarán las pymes y la reforma laboral sólo es un marco de actuaciones competitivas que puede ayudar".
El presidente de Aniacam resumió que ambas reformas (la financiera y la laboral) son instrumentos necesarios para salir de la situación de crisis, pero no constituyen ni pueden constituir la única herramienta.
Sobre las amenazas que se ciernen sobre el sector del automóvil, López Madrid, indicó que una subida del IVA "va a restar posibilidades al mercado; es una medida impopular, pero se hará si no hay más remedio y nos afectará negativamente por el impacto que tendrá en los usuarios".
Otra medida en estudio que afecta al sector del automóvil, como la generalización de los peajes en las autopistas para sufragar su mantenimiento, encierra una "alta probabilidad" de que se ponga en marcha, en opinión de López Madrid, aunque antes se hará preciso qué tipo de autovías arrastrarían la medida.
Respecto a la reiterada solicitud del sector de un plan de estímulo a la demanda, abogó porque si hay voluntad en el Gobierno de actuar "que se haga ya" y no adopten tácticas dilatorias que perjudican más al mercado.
Su organización ha propuesto tomar como referente de la fiscalidad al automóvil los niveles contaminantes de los coches y, sobre esa base, proponer una eliminación gradual del Impuesto de Matriculación para "ofrecer al Gobierno acciones posibilistas.
En concreto, López Madrid aboga por una supresión total del Impuesto de Matriculación para los tramos de emisiones hasta 160 g/km (actualmente hasta 120).
Ello haría que se pudiera estimular la venta de coches de segmentos superiores y más altos de precio y, a través de una mayor recaudación por IVA, compensar sobradamente la recaudación que ahora se hace entre 120 y 160 g/km con el Impuesto de Matriculación.