Para la formación de izquierda, tras el próximo 22 de mayo, será necesario un Plan de Saneamiento, serio, creíble y consensuado, en el que los compromisos que se asuman y los objetivos que se fijen, deberán ser posibles de alcanzar, y estar avalados por la firme voluntad de cumplirlos.
Para IU este Plan deberá cumplir la doble condición, de lograr el normal funcionamiento de los servicios municipales, con el cumplimiento estricto de las obligaciones legales, intentando alcanzar acuerdos con las administraciones de ámbito superior y organismos oficiales, que faciliten el reembolso de las deudas pendientes, ampliando plazos, estableciendo periodos de carencia, o por cualquier otro medio por el que resulte posible, restablecer la normalidad.
“Cuando llegaron nos prometieron, convertir a nuestra ciudad en referente y hoy han generado una trampa, cuyo alcance solo será posible evaluar cuando pueda hacerse una auditoria a fondo”.