En un escenario de ruina económica, el Ayuntamiento de Jaén ha dejado de recaudar casi un millón de euros al verse obligado a anular 7.005 expedientes sancionadores de tráfico que habían prescrito. El motivo fue la quiebra y cierre en octubre de 2017 de la empresa Unispost, encargada de realizar las notificaciones de los expedientes, así como la falta de una nueva empresa hasta el año 2019. Según informó la concejala de Hacienda, María Orozco, del total de multas prescritas, 3.025 son leves, con una cuantía de 151.758 euros; 4.184 son denuncias graves, por un importe de 794.600 euros; y medio centenar de multas son muy graves, con una cuantía aproximada de 25.000 euros. Todo ello para un total de 971.358 euros.
Por otro lado, hay que recordar que el Ayuntamiento de Jaén rescató en 2016 el cobro de las multas de tráfico en vía ejecutiva en la ciudad, que hasta entonces prestaba la empresa Vialine y que hasta 2014 fue un servicio encomendado a la Diputación Provincial. Pues bien, según denunció en su día el grupo municipal del PSOE, desde entonces dejaron de cobrarse casi 6.000 multas de tráfico en vía ejecutiva en la capital por haber prescrito y el impacto para las arcas municipales asciende a unos seis millones de euros. Además, durante este tiempo, la falta de bases de datos” izo que además no se pudieran notificar multas a vecinos de otras localidades que cometían una infracción en la capital al no poder cruzar datos con otros ayuntamientos de la provincia.