El plan de peatonalización del centro de Jaén, del que ahora se cumplen seis meses desde la entrada en servicio de sus primeras medidas, ha contado desde el principio con un consenso político, al menos en el fondo del asunto y la filosofía del mismo. Pero ayer los grupos que forman el Pleno municipal resquebrajaron esa unidad de acción por las diferencias que les separan en cuanto a las formas a la hora de aplicar las acciones. El alcalde de Jaén, Javier Márquez, principal artífice de este plan, rompió ayer el espíritu de unidad política al imponer su voto de calidad para deshacer el empate con el que se había saldado la moción presentada por Jaén en Común (JeC) donde se pedía analizar el primer semestre del plan y pulir todas las deficiencias surgidas en este tiempo.
“Hay que reconocer que nadie está libre de equivocarse, y más ante un proceso tan complejo”, espetó el portavoz de JeC, Manuel Montejo, que explicó que el motivo de la nación no era otro que “buscar espacios para revisar los acuerdos, escuchar a toda la gente y plantear soluciones”. Jaén en Común dejó la defensa de la moción en manos de Mari Carmen Alguacil, en representación de los vecinos de San Ildefonso. Alguacil se mostró muy crítica con los efectos de la peatonalización en su barrio. “Están aplicando un modelo de ciudad que despuebla el centro de día, y sólo funciona de noche; parece que la peatonalización se hace sólo para favorecer a la hostelería”, dijo la portavoz vecinal. Y censuró que el gobierno municipal “no haya aplicado las medidas que prometieron” y lamentó la caída de las ventas en el comercio tradicional, que cuantificó entre el 20 y el 25%, y del 45% en algunos casos.
El concejal de Tráfico, Juan Carlos Ruiz, defendió en primera instancia la moción, destacando las numerosas reuniones mantenidas con colectivos vecinales, la ampliación de las zonas de carga y descarga y negando que se hayan eliminado aparcamientos. Pero fue el alcalde, Javier Márquez, el que posicionó al gobierno municipal defendiendo su plan de peatonalización y eludiendo cualquier autocrítica. Márquez admitió que los comercios de la zona del perímetro peatonal han podido sufrir pérdidas en las ventas, pero fue algo que vinculó al contexto nacional, mostrando numerosos recortes de prensa con pérdidas similares en el comercio local de otras provincias españolas. “El comercio tradicional está bajando en toda España, y no es por la peatonalización, sino debido al auge del comercio electrónico”, señaló el alcalde, que incorporó otro motivo añadido a la bajada de ventas: las persistentes lluvias durante todo el invierno y la primavera. Márquez negó cualquier improvisación al respecto y zanjó el debate indicando que “no se puede pretender tener una peatonalización a la carta”. Desde el PSOE, la concejala Matilde Cruz recordó el apoyo de su grupo al plan peatonal, pero acusó al gobierno del PP de “empezar la casa por el tejado” y de improvisar.
“La peatonalización no es impedir la circulación de vehículos ni prohibir los aparcamientos,pues eso está dejando aislados a los barrios de la zona sur”, indicó la edil socialista, que echó en falta medidas previas para habilitar aparcamientos disuasorios, mejorar el servicio de autobuses urbanos con un billete de transbordo incorporado o la convocatoria del Consejo de Movilidad. De los tres ediles no adscritos el único que votó en contra fue Iván Martínez, bautizado ya por JeC como el “concejal de Veladores y Retretes”, por su vinculación con una firma de WC portátiles. En cambio, Salud Anguita criticó con dureza que el proceso de peatonalización se haya activado “sin apoyos y sin diálogo” y lamentó la dificultad para acceder el párking de San Francisco. Y Víctor Santiago también aludió a los “comercios que se van a pique” y demandó “altura de miras “ para consensuar las actuaciones.