La Cofradía de la Virgen Blanca, la segunda más antigua de Jaén, celebró ayer su día grande con la Santa Misa y la procesión de la Sagrada Imagen por los alrededores de la Ermita del cerro de la Imora. “Estamos muy satisfechos porque en estos seis años hemos conseguido abrir esta Romería a todo Jaén y nos han acompañado centenares de personas, en el que ha sido un día muy alegre y de convivencia”, reconoce el hermano mayor, Félix Ramírez, que acaba su segundo mandato en la Cofradía.
Seis anderos llevaron en procesión a la Virgen, acompañados por el capellán de la Cofradía, José López Chica, y numerosos cofrades que finalizaron los actos religiosos con la degustación de la tradicional paella, con la que culminaron los actos programados por la Romería en honor a la Reina de la Imora. José manuel garcía