El Ministerio del Interior, a través de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias y de acuerdo con los datos e informaciones que viene facilitando el Instituto Geológico Nacional (IGN), está realizando el seguimiento permanente de los movimientos sísmicos que se han producido en la provincia de Jaén a lo largo de la semana y, con especial intensidad, durante este fin de semana, según ha explicado el departamento que dirige Jorge Fernández.
Así, el Ministerio ha informado que permanece en estrecho contacto con los responsables de Protección Civil de la autonomía, intercambiando la información necesaria.
Este sábado, 15 de diciembre, se produjeron un total de once movimientos sísmicos, de los que dos han sido sentidos levemente por la población. El primer movimiento se registró a las 17,00 horas, con epicentro al sureste de la localidad de Sabiote (Jaén), magnitud de 3,3 y una profundidad de 2 kilómetros. Según Interior, ha sido sentido con intensidad III en Sabiote, Torreperogil y Úbeda y, más débilmente, en las localidades de Navas de San Juan y Linares.
El segundo, de magnitud 3,5 y profundidad de 3 kilómetros, tuvo lugar a las 19,59 horas, con epicentro al suroeste de la localidad jienense de Torreperogil. Ha sido sentido con intensidad V en Torreperogil, IV en Úbeda y III en Sabiote. Los otros nueve movimientos sísmicos, producidos el pasado sábado, no han sido sentidos por la población, ya que han tenido magnitudes entre 1,5 y 2,4 y profundidades entre 0 y 4 kilómetros.
Del mismo modo, en la madrugada de este domingo, a las 5,09 horas, ha tenido lugar un nuevo movimiento, de magnitud 3,3 y profundidad superficial, con epicentro en el suroeste de Sabiote. Ha sido sentido con intensidad III en Úbeda y, más levemente, en Torreperogil. Además, a lo largo de la noche, se han producido otros nueve movimientos sísmicos, de baja intensidad, que no han sido sentidos por la población.
En principio, no hay noticias de que ninguno de estos movimientos sísmicos haya provocado daños personales ni materiales, según ha apuntado el Ministerio del Interior.
Ante esta situación, Interior recomienda adoptar una serie de medidas preventivas, tales como revisar, controlar y reforzar el estado de aquellas partes de las edificaciones que primero se pueden desprender, como chimeneas, aleros o balcones, al igual que aquellas instalaciones que pueden romperse: tendido eléctrico, conducciones de agua, gas y saneamientos.
Además, recomienda extremar las precauciones en cuanto a la colocación y sujeción de algunos objetos que pueden caerse, en especial los pesados y los que pueden romperse --como lámparas, espejos, botellas-- y tener un especial cuidado con la ubicación de los productos tóxicos o inflamables, a fin de evitar que se produzcan fugas o derrames.
Interior recomienda que si se produce un terremoto de una cierta intensidad, se intente concentrar la atención en evitar riesgos y buscar refugio debajo de los dinteles de las puertas o de algún mueble sólido, como mesas o escritorios, o bien, junto a un pilar o pared maestra. También hay que mantenerse alejado de ventanas o cristaleras, no utilizar el ascensor, usar linternas para el alumbrado (evitando la velas), e ir hacia un área abierta, alejándose de los edificios dañados.