El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha advertido hoy a los responsables de la Generalitat de que están aún "a tiempo de evitar males mayores" y les ha pedido que renuncien a un referéndum que siempre ha sido ilegal y que, ahora, considera que ya es sólo "una quimera imposible".
"No sigan adelante, no tienen ninguna legitimidad, regresen a la ley y a la democracia", ha dicho Rajoy en una comparecencia en el Palacio de la Moncloa en la que ha leído una declaración institucional.
En ella ha insistido en que no renunciará a ninguno de los instrumentos del Estado de derecho para "evitar que la sinrazón de unos pocos la sufran el conjunto de los ciudadanos", pero actuando siempre de forma "firme, proporcionada y rigurosa".
Tras la detención de catorce supuestos organizadores del referéndum, entre ellos una decena de cargos de la Generalitat, y la intervención de numeroso material, Rajoy ha defendido la "respuesta integral del Estado de Derecho".
Y a renglón seguido es cuando ha pedido a los responsables de la Generalitat que cesen en sus actuaciones y abandonen sus propósitos.
"Saben que este referéndum ya no se puede celebrar. Nunca fue legal ni legítimo. Ahora -ha asegurado- no es más que una quimera imposible o, lo que es peor, la excusa que algunos parecen buscar para ahondar aún más la fractura que han provocado en la sociedad catalana".
Rajoy les ha trasladado que si les importa la tranquilidad de la mayoría de los catalanes "renuncien de una vez a esta escalada de radicalidad y de desobediencia".
"Están a tiempo de evitar males mayores. A nadie beneficia esta tensión ni este clima de desobediencia, ni este desafío constante a la Justicia y a la ley", ha reiterado.
A los representantes de la Generalitat se ha dirigido igualmente al señalar que en democracia siempre hay cauces para defender cualquier posición política dialogando desde el respeto a la ley.
En alusión a Podemos, Rajoy ha hecho una advertencia a quienes "aprovechan el órdago independentista" para "generar inestabilidad en las calles" y "debilitar las instituciones".
"Les advierto de que tendrán que responder ante los españoles de su deslealtad en un momento tan decisivo de la vida política", ha añadido.
Y ha proseguido: "Lo que está en juego no es una demanda política. Está en cuestión el propio fundamento de la democracia. El Estado de derecho ha actuado y seguirá actuando".
Ha añadido que en los últimos días se ha demostrado que España es un estado democrático y de derecho que tiene los mecanismos e instrumentos necesarios para impedir que quienes infringen las normas básicas puedan hacerlo.
Mecanismos también, ha apostillado, para exigir responsabilidades a quienes "con tanta imprudencia" están poniendo en "grave riesgo" la convivencia.
Ha recordado que hace unos días garantizó que el Estado de Derecho no fallaría y que nadie vacilaría, ni Gobierno, ni Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, ni fiscales, ni jueces, ni tribunales, a la hora de cumplir con su deber, y ha subrayado que todos ellos están defendiendo los derechos de todos los españoles, incluidos los catalanes.
Rajoy ha recalcado que nadie puede pretender situarse por encima de la ley, y que la desobediencia por parte de un poder público es todo lo contrario a la democracia y un ataque a la raíz de la convivencia.
"Radicalmente antidemocrática"
El presidente del Gobierno ha subrayado que la convocatoria del referéndum es, desde su inicio, "radicalmente antidemocrática" y ha advertido de que a lo largo de la historia muchos regímenes democráticos han utilizado el voto ciudadano para intentar legitimarse.
"Votar sólo es sinónimo de democracia cuando se hace de acuerdo con la ley y con respeto a los derechos de todos. No se puede votar para incumplir la ley; se vota -ha precisado- para cambiarla por métodos lícitos".
Rajoy, en referencia a PSOE y Ciudadanos, ha agradecido la colaboración de los partidos "que saben que este es el momento de proteger a la nación y no de ponerla en duda".
"No entiendo su actitud como un apoyo al Gobierno, sino como un compromiso con España, con su democracia y con el conjunto de los españoles", ha recalcado antes de calificar de "imprescindible" esa unidad de los partidos constitucionalistas.
Una unidad que cree que es el mejor respaldo que se puede brindar a alcaldes, concejales, funcionarios y policías locales de Cataluña "que están siendo amenazados, insultados y acosados por el simple hecho de negarse a incumplir la ley".