El Regal Barcelona se llevó claramente (57-81) el clásico catalán contra el DKV Joventut, que suma su cuarta derrota consecutiva en la ACB, el día que Ricky Rubio volvió por primera vez a Badalona con la camiseta del eterno rival.

El base verdinegro aguantó el abucheo general de su antigua afición. El DKV Joventut recuperó a Clay Tucker para el encuentro pero su inoperante juego interior no tuvo ni una opción de victoria.

Sito Alonso quiso sorprender de salida a su amigo Xavi Pascual colocando a su equipo en una zona 3-2 que Gianluca Basile, novedad azulgrana en el quinteto inicial, se encargo de desmontar con dos triples que dieron ventaja a su equipo (5-9, min. 4).

Ricky Rubio apenas jugó 3:38 en el primer cuarto debido a que rápidamente cometió su segunda falta personal. Antes había anotado una de las siete canastas de tres que el Regal Barcelona consiguió en el primer período.
El acierto de los azulgranas desde la línea de 6,25 permitió a los visitantes concluir el primer cuarto con una cómoda renta de 13 puntos (14-27).

El DKV Joventut, inferior bajo los aros, se encomendó a los triples, anotando más canastas de tres puntos que de dos en los primeros 10 minutos. Krispars Valters fue su jugador más acertado.

Fue el dominio en el rebote, sobre todo de Boniface Ndong, lo que permitió al Barcelona dominar cómodamente el partido llegando a dominar de 15 puntos de diferecia (26-41, min. 17). Los azulgranas sumaron 9 rebote ofensivos en los dos primeros cuartos.

Al DKV Joventut le falló además la dirección de equipo y Sito Alonso volvió a dar las riendas del equipo al canterano Josep Franch, relevo natural de Rubio en las filas verdinegras.

Sus puntos y los de Hernández Sonseca permitieron a los locales reducir la diferencia hasta los 10 puntos (33-43, min. 20). Dos tiros libres anotados por Navarro dejaron el marcador al descanso en 33-45. El Barcelona sentenció el partido en el inicio del tercer período con Basile y Navarro implacable en el tiro exterior (33-56, min. 25). Bueno consiguió la primera canasta de los locales en este cuarto cuando ya se habían superado los cinco minutos de juego.

La insultante superioridad de Ndong bajo los aros lanzó a los azulgranas en el marcador hasta conseguir una máxima diferencia de 25 puntos (40-65, min. 35).

Reaccionó el DKV Joventut en el último cuarto de la mano de Bogdanovic y Koffi (52-66, min. 35) pero el partido ya no tenía historia y lo único interesante fue el duelo entre Josep Franch y Ricky Rubio, dos bases salidos de la cantera verdinegra. Rubio ofreció sus mejores minutos en el tramo final del partido para lanzar a su equipo a una diferencia superior a los 20 puntos en el marcador final.

RESTO DE LA JORNADA

El Unicaja celebró su partido número 1.000 en la máxima competición con una holgada victoria (97-72) ante el Lagun Aro, que aplacó algo el enfado de los aficionados cajistas por la irregular temporada y por la falta de actitud en algunos encuentros, sobre todo contra el Asseco Prokom de la Euroliga.

Con una brillante demostración de talento, el base Nando De Colo (29 puntos) condujo a un sólido Power Electronics Valencia a su décima victoria consecutiva como local ante el Granada, al que batió por veinte (87-67).