El Club Deportivo Cabecense es el vivo ejemplo de la moderación, seriedad y el buen trabajo hecho. Hace dos temporadas escasas militaba en la Regional Preferente sevillana, para colarse dos años después en la Tercera División.
Dos ascensos consecutivos, han devuelto de nuevo a los hispalenses a la categoría nacional, donde militaron en la 2006-2007.
El Cense, tal y como se le conoce entre su hinchada, está formado prácticamente con jugadores de la localidad (Las Cabezas de San Juan) donde basa casi por obligación su composición principal. A ellos hay que unir jugadores con experiencia en la categoría.
En la presidencia está Álvaro Raya, 38 años, que en su tercer año de mandato ha devuelto la ilusión y el reconocimiento a los rojinegros.
El Cabecense disputa sus encuentros en el Municipal Carlos Marchena, que da nombre al futbolista del Deportivo de La Coruña, jugador más insigne tras ganar los Juegos de Sydney 2000, la Eurocopa de 2008 y el Mundial de Sudáfrica 2010. Tiene una capacidad para unos 1.500 espectadores y se inauguró en 1983.
El abono de temporada ronda entre los 70 y los 90 euros. El presupuesto es de 120.000 euros y su web oficial es www.cdcabencense.com.
Está dirigido por Diego Román, técnico que ha conseguido igualmente los dos últimos ascensos de categoría. Con 48 años, será la primera vez que dirija en Tercera. Anteriormente, estuvo enrolado en equipos de la provincia sevillana como el Benacazón, Dos Hermanas o Lebrijana, entre otros.
El Cabecense quedó primero en el Grupo 2, consiguiendo el ascenso de una manera autoritaria y firme. Mantienen prácticamente el mismo bloque de la campaña anterior con algunas incorporaciones puntuales.
En su objetivo de mantener la categoría, cuenta con Humberto, 33 años, uno de los pocos supervivientes de la última aparición en Tercera División. Lateral derecho polivalente y con un gran despliegue físico importante. Es sin duda el ídolo de la afición cabecense.
La armonía entre líneas fue uno de los secretos para cosechar el objetivo final y viendo el fruto obtenido, es la premisa fundamental en el presente ejercicio. Equipo compensado, disciplinado y aguerrido. Su adaptación a la categoría y tras ver los resultados cosechados en este inicio liguero, ha sido todo una.
Es quinto en la tabla con ocho puntos tras dos victorias (Cádiz B y Pozoblanco) y dos empates (Recreativo B y Antoniano). Perdió en Ceuta por la mínima.