Ona Carbonell, doble medallista en los Mundiales de natación de Kazán (Rusia), afirmó en un acto celebrado este lunes en el Consejo Superior de Deportes con jóvenes de la natación sincronizada española, que la cita mundialista ha sido "difícil para todos" y de la que "han aprendido mucho".
Carbonell, plata en solo técnico y bronce en solo libre en Kazan, fue recibida hoy por el equipo infantil español de natación sincronizada y reconoció que antes de acudir a tierras rusas sabían que España estaría "entre el tercer y el quinto puesto".
La nadadora catalana hizo balance positivo sobre los resultados obtenidos por el equipo español, asegurando que se ha producido "una gran mejora en los solos" y que "la imagen en general ha sido muy buena" en los Mundiales.
"Tenemos grandes rivales, pero la imagen era muy importante de cara a los Juegos", añadió Ona Carbonell, que se mostró segura de que los resultados cosechados en Rusia han servido al combinado español como "aprendizaje" y "para coger fuerzas de cara" a la cita olímpica del año que viene en Río de Janeiro.
En el acto estuvo presente Ana Montero, directora técnica del equipo de Natación Sincronizada de la Real Federación Española de Natación (RFEN), que reconoció que tienen "dificultades para encontrar la pareja de Ona" debido a su gran calidad, un tema sobre el que tomarán "la decisión en septiembre".
"Salimos reforzadas. Nos llevamos muchas cosas que tenemos que analizar, repasar y estudiar", dijo Montero, quien destacó el ascenso de "los países asiáticos" en la sincronizada y dijo que de cara a Río, desde el equipo español, aún "se puede hacer mucho trabajo".
Ona Carbonell señaló que el estreno en los Mundiales de Kazán de la modalidad del dúo mixto, donde compitieron Gemma Mengual y Pau Ribes por España, es algo "positivo para la natación sincronizada".
La capitana del equipo español absoluto deseó suerte para la Copa Comen de natación sincronizada al combinado infantil, con el que compartió las medallas mundialistas y los bañadores con los que compitió.