El ambiente desapacible de este mediodía, con lluvia y con un Municipal desangelado sin su público en el último partido en casa de este extraño 2020, se trasladó al césped, donde ni Balona ni Las Palmas Atlético ofrecieron demasiado. Los linenses, una vez más, demostraron su solidez, pero siguen mostrando carencias en el plano ofensivo.

Los de Calderón tuvieron el control del juego. Sin embargo, en la primera mitad les costó llegar y apenas dispusieron de un remate muy escorado de Pito Camacho, en el minuto 9, a centro de Barrios, y un disparo de Chironi (25’) desde fuera del área. Tampoco el filial canario ofreció muchos problemas y un remate fuera de Pau (21’) tras un saque de Pau fue su única presencia en el área linense.

En la segunda parte, el conjunto local mantuvo el dominio del encuentro, si bien se mostró incapaz de desarbolar a un rival que se defendió bien y que terminó de encerrarse tras la expulsión de Joel, por una patada en la cara de un jugador local.

Con uno menos, el cuadro canario se metió atrás y supo resistir a una Balona que inquietó, pero no pudo generar ocasiones como para llevarse el partido.

Los albinegros visitarán el sábado a las 18.00 horas al San Fernando.