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Campo de Gibraltar

La Casa de La Memoria rinde homenaje a los represaliados

Conmemoración del tercer aniversario de la Casa de la Memoria La Sauceda, en Jimena

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  • Dos de las homenajeadas por el Foro por la Memoria -

La Casa de la Memoria La Sauceda, iniciativa del Foro por la Memoria del Campo de Gibraltar, nació el 16 de noviembre de 2016. En 2005 se constituyó el Foro, pero el germen que dio lugar al nacimiento de la asociación está en las Jornadas Guerrilleras celebradas los días 12, 13 y 14 de abril de 2002, en Algeciras. Desde ese momento hemos realizado numerosas actuaciones  en defensa de la recuperación de la memoria histórica.

El viernes, la entidad celebró el tercer aniversario de la inauguración de la casa, un lugar dotado de todo lo necesario para convertirla en un espacio público para difundir, investigar y reflexionar sobre la memoria histórica. Ese viernes, el presidente de la asociación, Andrés Rebolledo, aseguró que están preparados para luchar contra el fascismo en unos tiempos donde la ultraderecha ha vuelto a resurgir con fuerza en España. “Vamos a seguir combatiendo. Se lo debemos a nuestros familiares asesinados, encarcelados, torturados, exiliados o condenados al hambre, la miseria y el silencio. Se lo debemos también a nuestros hijos e hijas. Ellos han de conocer la historia  de nuestros pueblos y tienen que comprender que el fascismo sólo trae muerte, destrucción y pobreza. Debemos enseñarles que es de cobardes despreciar al débil y adorar al fuerte y poderoso. Que quien odia al inmigrante, a la mujer que es libre o al homosexual, en el fondo, no es más que un ser inseguro, temeroso  e ignorante que disimula con violencia lo poca cosa que se siente y es él mismo. Que todas las patrias y las banderas juntas no valen nada comparadas con la vida de un ser humano”, aseguró en su intervención.

Fue también un homenaje a los hijos, hermanos y nietos o de los hombres y mujeres que las tropas fascistas asesinaron en este Jimena entre 1936 y 1949. Una investigación realizada en su día por el historiador José Manuel Algarbani dio como uno de sus resultados un listado de 98 vecinos de Jimena que fueron fusilados en éste u otros puntos de España, de los cuales la mitad fueron asesinados en este mismo municipio.

Un equipo de arqueólogos contratado por la Diputación de Cádiz descubrió el 24 de julio pasado en el cementerio municipal una fosa común con los restos de cinco personas fusiladas. En la primavera de 2020 está prevista la exhumación para sacar de allí los restos de todas las personas que encontremos.

En representación de todas las víctimas del fascismo en Jimena el Foro entregó  una ilustración realizada por el artista sanroqueño Andrés Vázquez de Sola a dos vecinas de este pueblo: Francisca Saraiba Acedo y Francisca Téllez Medina. Los padres de una y otra fueron fusilados por las tropas franquistas.

Francisca Saraiba Acedo tiene ahora 93 años; sus padres se llamaban José y Pepa. José fue zapatero y guardia municipal en San Pablo durante la República. Francisca tenía 9 años cuando comenzó la guerra. Cuando la Guardia Civil se llevó a José, su esposa estaba embarazada.

Francisca dice ahora que su padre era muy bueno y cariñoso con sus hijos y sólo tiene palabras de admiración para su madre que, a pesar de todas las dificultades, sacó adelante a su familia. Trabajó recogiendo naranjas, aceitunas, o lo que fuera. En todas las faenas que salían en el campo. Y mientras, Francisca, con nueve o diez añillos, cuidando de su hermana pequeña, que nació en junio, cinco meses después de que su padre fuera asesinado.

Francisca Téllez Medina es jimenata de San Pablo y nació catorce días después que la Segunda República española. Es decir, el 28 de abril de 1931. Era hija de Sebastián y María, que ya tenían dos hijos que morirían siendo aún pequeños. Sebastián hacía carbón en el monte, sacaba corcho en verano y trabajaba de jornalero en lo que salía. Recuerda cómo iba a hombros de su padre camino de Málaga cuando medio San Pablo huyó cuando corrió la voz de que venían los moros. Su familia y el grupo con el que viajaba llegó hasta San Pedro de Alcántara y de allí de vuelta a San Pablo, donde, al volver, su abuela materna descubrió que le habían quitado la panadería y sus padres que también se habían quedado sin casa.

 Francisca recuerda con claridad cómo iba vestido su padre, un hombre alto, de piel y pelo claros, cuando se lo llevaron para Jimena con otros vecinos de San Pablo. Ninguno regresó. Francisca dice que aquel día los fascistas dejaron viudas a cuatro embarazadas de San Pablo: Pepa la Huercana, Juana Mora, Clotilde y María, su madre. Todas las viudas se pusieron entonces a trabajar. Iban juntas a recoger aceitunas, algodón, maíz o lo que fuera. Y Francisca, como otras niñas, acompañaba y ayudaba a su madre en el trabajo. Unos funcionarios municipales visitaron tiempo después a su madre y al resto de las viudas. Querían que firmaran unos papeles en los que decía que su marido había muerto de muerte natural. Ni su madre ni ninguna de las viudas firmó. Se quedaron sin pensión en tiempos de tanta hambre y miseria, pero no traicionaron a sus maridos ni a sus principios.

Con el tiempo, Francisca se casó con un vecino y amigo de la infancia, José Sánchez Pacheco, huérfano también. A su padre, Felipe Sánchez Guillén, lo mataron los fascistas el mismo día que al padre de Francisca.

 

El foro también homenajeó a Luis Vega Sevillano, un vecino de Paterna de la Rivera que tenía siete años el 19 de julio de 1936 cuando un grupo de  falangistas se llevó a su madre para asesinarla y días más tarde fusiló a su padre. Luis Vega ha sido pieza clave en todo el proceso de recuperación de la memoria en Paterna, que tuvo su punto culminante  el 16 de julio pasado cuando se dio un entierro digno a los restos de ocho hombres y dos mujeres hallados en la exhumación que se hizo en 2015 en el cementerio de Paterna impulsada por la Dirección General de Memoria Democrática la Junta de Andalucía.

Jesús Román, el arqueólogo de aquella exhumación  y de muchas otras en Andalucía, fue otro de los homenajeados.  “Román no sólo es un excelente profesional  y una persona de una gran sensibilidad para con los familiares de las víctimas sino que es uno de los hombres que más ha hecho por la memoria histórica en Andalucía.

Otro grande de la memoria histórica homenajeado fue: Cecilio Gordillo, coordinador del grupo de trabajo Recuperando la Memoria Histórica y Social de la CGT-Andalucía e impulsor infatigable de la página web Todos los Nombres, que ya reúne información de 101.400 personas víctimas del fascismo en Andalucía, Extremadura y el Norte de África, además de 843 microbiografías y 1.483 documentos.

Lucía Socam, joven cantautora de Guillena, fue la encargada de poner música a este aniversario. Lucía Socam es también una colaboradora constante e incansable de la causa de la memoria. Su último trabajo, con poesías de Mario Benedetti, está dedicado a  los cientos de miles de personas que en 1939 tuvieron que marchar al exilio.

 

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