La Policía Nacional ha detenido en el Puerto de Tarifa a un ciudadano belga de 46 años reclamado por las autoridades francesas.
Según ha explicado la Policía en un comunicado, fue localizado cuando intentaba entrar a territorio Schengen a través del puesto fronterizo marítimo.
La detención se produjo cuando se le requirió la documentación en el control de entrada de ciudadanos extranjeros a territorio nacional.
Los agentes de fronteras verificaron que sobre el viajero recaía una reclamación judicial en vigor para su extradición.
El detenido estaba reclamado por las autoridades francesas, las cuales habían emitido un Orden Europea de Detención y Entrega para su extradición.
Se le acusa de graves delitos de fraude y actividades contrarias a la salud pública, incluyendo los que afectan a intereses financieros de las Comunidades Europeas, según la Convención de 26 de julio de 1995, con una posible condena de hasta diez años de prisión.
Una vez ratificada tal reclamación a través del sistema Sirene (Supplementary Information Request at the National Entry), se puso en marcha el protocolo establecido para hacer efectiva la entrega y puesta a disposición de los Juzgados Centrales de Instrucción ubicados en Madrid y así ejecutar su extradición.