La Junta de Andalucía, y más concretamente su Consejería de Salud, mantiene una ‘guerra encubierta’ con la empresa de Hospitales Pascual, SL que cada día va dejando nuevos titulares. Ya sean a través de sentencias como la de este pasado lunes, donde el Tribunal Supremo anulada la prórroga del concierto dada a Pascual en el año 2014, ya sean a través  de enfrentamientos directos en aquellas localidades donde Pascual tiene clínicas.

Ayer transcendió, a través de una información de La Ser en Cádiz, que el delegado territorial de Salud de la Junta de Andalucía en la provincia, Manuel Herrera, había remitido una carta a la empresa Pascual “en la que le exige que cese de atender a pacientes del Servicio Andaluz de Salud en la clínica de San Rafael” de Cádiz capital.

Viva Cádiz ha tenido confirmación de este extremo al tiempo que nos informan que el motivo de la carta se centra en la oferta de Pascual  de atender a pacientes gratis en el servicio de Urgencias de la Clínica de San Rafael, sin poder saber más del contenido de la citada misiva.

La clínica San Rafael lleva ofreciendo este servicio desde finales de febrero, a pesar de la oposición de la Junta de Andalucía y de la Marea Blanca de Cádiz, siendo el alcalde de Cádiz, José María González, casi el único apoyo que ha tenido esta medida.

Una medida que fue criticada con dureza por el propio  vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios,  quien dijo esperar que el alcalde “no se equivoque” en su defensa de la iniciativa de Pascual de abrir de forma gratuita las urgencias del hospital de San Rafael para los usuarios del sistema andaluz de salud.

Jiménez Barrios dijo en su día que "todo el mundo sabe ya cómo se conduce" la empresa sanitaria y ha recordado que "al concurso abierto no se presentó el hospital de San Rafael".

Y es que las Urgencias de San Rafael no tenían  prácticamente actividad, a falta de un concierto con la Junta de Andalucía.

El consejero ha recalcado que la sanidad pública "garantiza la prestación sanitaria a todo el mundo, y lo que todo el mundo debe saber es que eso -en referencia a la oferta de asistencia sanitaria de Pascual- no está dentro de la sanidad pública".

"En el ámbito de su actuación como empresa está en su derecho de hacer lo que crea oportuno, pero eso es una práctica ya muy conocida", ha apuntado Jiménez Barrios

El servicio de Urgencias del hospital de San Rafael no tenía en la actualidad un concierto con la sanidad pública andaluza y en él sólo se atendía a clientes de seguros privados hasta finales de febrero donde empezó a atender a pacientes del SAS.

Ahora, según informó la SER, “según cálculos del comité de Pascual, sólo en la clínica de San Rafael se atiende diariamente a una treintena de personas. Y va creciendo el número” en palabras del presidente del citado comité, José María Manzano.

También según la SER, en la carta la Junta teme que “se induzca a error a los ciudadanos, a los que se hace creer que esa tutela médica está bajo el paraguas del SAS, cuando no es así”.

“Puede ocasionar una distorsión en la planificación asistencial en los centros públicos, vulnerando la obligación de la coordinación de todos los dispositivos de atención sanitaria por parte de la Consejería de Salud y las delegaciones territoriales a efectos de una correcta planificación”, indica para insistir en que “no se puede prestar un servicio como este sin un previo acuerdo con la Junta de Andalucía, y que ese concierto ahora mismo no existe”.

Por ello se insta a Pascual a que cese la actividad a pacientes del SAS y  recuerda, como indica La SER, “que ninguna de estas actuaciones podrán ser facturadas con cargo al sistema sanitario público. En caso de no cesar esta atención, se tomarán las medidas cautelares que en derecho procedan".