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El Centro Cultural de Adra vibra con la voz de Eva Santamaría y la interpretación de Máximo Valverde

La obra de los Hermanos Quintero ?Con ganas de reñir? conquistó a un público que estuvo a punto de completar el aforo del teatro municipal

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  • Un momento de la obra de teatro.
El Centro Cultural de Adra vibró anoche con la voz de Eva Santamaría y la interpretación de Máximo Valverde, que lograron rozar el lleno absoluto del teatro municipal abderitano. Esta actividad fue recuperada por el equipo de Gobierno hace ya dos años y ha logrado convertirse en un referente de los festivales previos a las Fiestas de Adra. La obra de los Hermanos Quintero ‘Con Ganas de Reñir’ logró cautivar a un público que disfrutó de las coplas de siempre, la poesía zalamera y el humor sencillo y popular que caracterizó siempre a los dos dramaturgos.

El experimentado actor Máximo Valverde y la cantante y actriz Eva Santamaría lograron, una vez más, rendir un merecido homenaje a las raíces culturales andaluzas y mantener entretenido durante algo más de hora y media a un publico que pudo disfrutar del mejor humor y las mejores coplas con sainetes como El Cuartito de Hora o Sangre Gorda, ambos escritos por estos dramaturgos. Los entremeses de los hermanos Álvarez Quintero relatan divertidas situaciones de pareja en los primeros años del siglo XX. Así, Sangre gorda y El cuartito de hora presentan en clave de humor los conflictos que surgen en cualquier pareja y que demuestran que la relación entre hombres y mujeres no ha cambiado tanto con el paso del tiempo.

Máximo Valverde interpreta a Carlos González, personaje que convoca un casting para elegir a la protagonista de su nueva obra de teatro, Con ganas de reñir. Después de un lago día haciendo pruebas a muchas chicas, no ha encontrado en ninguna las cualidades que busca para la protagonista de su obra, que deberá saber cantar, bailar e interpretar. Cansado y desesperado, se dispone a irse cuando aparece Milagros (Eva Santamaría), una chica que ha llegado tarde al casting y confunde a Carlos con el conserje de la sala. Carlos aprovecha para hacerle un casting muy particular y divertido, en el que dan rienda suelta a la música, la interpretación, la poesía y el arte que ambos llevan dentro.

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