Hace una semana, en concreto, el pasado martes 17 de febrero, el viejo Cuartel de la Guardia Civil pasaba a la historia. Una vez que se ha quedado una perspectiva totalmente nueva, las protagonistas absolutas son las máquinas y las excavadoras que, poco a poco, están retirando las cientos de toneladas y cascojos que se acumulaban con todo tipo de materiales. Incluso, realizan pequeños fuegos para ir quemando los palos y no pasar frío los trabajadores por las mañanas.
Ha sido más que curiosa la imagen que se ha estado produciendo en la céntrica Avenida Medina Olmos de Guadix durante estos días. El pasado martes se procedía a la demolición total del edificio del viejo cuartel de la Guardia Civil y, desde el mismo miércoles, han sido múltiples las personas que provistos con todo tipo de materiales e, incluso, furgonetas en la misma puerta del viejo cuartel, han aprovechado para intentar hacer su “pequeño agosto”, expoliando los materiales de desecho. Entre ellos, por lo que se puede observar, los que más interesan para una posible venta en el mercado de segunda mano, son los cables de cobre, palos para la leña o todo tipo de ladrillos. Los viandantes se sorprendían con la perspectiva de los materiales de desecho acumulados junto a una gran grúa en un lugar obligado de paso, ya que está situado casi en el pleno centro de la Ciudad Episcopal.