Recuperemos el Gran Teatro Cervantes

El proyecto de recuperación del Gran Teatro Cervantes nace hace más de dos años. Surge de la necesidad que tenemos desde Sala Cero Teatro de seguir creciendo como empresa y también de observar la carencia de espacios de unas determinadas características, tales como son gran formato de orientación comercial y que haga temporada. Pensamos que Sevilla necesita ya, por evolución,  un espacio de tales condiciones, todo ello consecuencia de la red de espacios (tanto públicos como privados) existentes, que han hecho de nuestra ciudad un referente en lo que se refiere a exhibición escénica, pero tenía una carencia, el gran formato comercial, de ahí la propuesta que presentamos.
Durante estos más de dos años hemos realizado un plan de viabilidad de explotación y el proyecto arquitectónico, el cual ha necesitado un largo periodo por carecer el edificio de planos, con lo cual nos hemos visto obligados a contratar un estudio de topografía que durante más de cuatro meses estuvo trabajando, y con sus datos el estudio de arquitectura pudo hacer el proyecto arquitectónico de rehabilitación íntegro.
No olvidemos que el Gran Teatro Cervantes se inauguró el 13 de octubre de 1873, fue obra del arquitecto Juan Talavera y de la Vega, es decir va a cumplir 140 años, y nos parecía una fecha bonita para su reinauguración, pero no vamos a llegar.
Pensamos que es patrimonio de nuestra ciudad (tanto histórico, cultural como arquitectónico), y ello obliga a que todas nuestras Administraciones deban protegerlo, y nuestro proyecto busca recuperar el esplendor de un símbolo de la ciudad. Por eso pedimos que participen de forma mucha más activa, dicho de otra forma, invertir en él es invertir en la ciudad. Recordemos que la principal industria de Sevilla es el turismo, y nuestro proyecto viene a fortalecer y hacer crecer dicho sector.
Somos perfectamente conscientes de la situación socio-económica actual, y en especial de nuestra ciudad, pero precisamente por eso invertir en este proyecto es invertir en creación de empleo, dado que el turismo como motor económico de Sevilla hace que tenga suficientes estructuras e infraestructuras para hacerlo atractivo a futuros espectadores, y buscar que complementen la visita a nuestra ciudad con grandes espectáculos escénicos, que sea un motivo más para venir.
Una vez dicho esto, pasemos a la parte económica de la recuperación del espacio. El proyecto completo de rehabilitación es de tres millones de euros y dos años de obras. Lógicamente eso implica un esfuerzo económico fuera de nuestro alcance (dado que es más barato construir un teatro nuevo que rehabilitar), por ello insistimos en una mayor implicación de todas nuestras Administraciones, ya que esto va más allá de un proyecto empresarial, sino (como ya hemos señalado) de recuperación de un atractivo para toda la ciudad.
Por otro lado, está la puesta en práctica de la explotación. Ahí es donde decidimos llevar a cabo el proyecto por fases. Primero, para no tener tanto tiempo cerrado el espacio; y, segundo, para que éste vaya ya generando ingresos. Dicho de otra forma, recuperamos la planta baja y abrimos, y con lo que ingresemos rehabilitamos otra planta, y así sucesivamente, hasta completar el edificio entero, con lo cual no tenemos el espacio tanto tiempo cerrado e iniciamos su explotación antes. Evidentemente esta forma es más engorrosa pero más eficiente.
Nuestra idea es programar no sólo artes escénicas, sino también cine, música, presentaciones, es decir todo aquello que tenga cabida en el espacio, y participar de forma activa en los eventos culturales de la ciudad, tales como Festival de Cine, Bienal de flamenco, FEMAS, FeSt… Resumiendo, conseguir que el Gran Teatro Cervantes sea un termómetro de la vida cultural y social de Sevilla, y también que los sevillanos nos identifiquemos con él y podamos sentirnos parte de él, de ahí que posiblemente a todos os pidamos colaboración.