Salvo dos establecimientos, el resto dejó a oscuras su negocio y salió a la calle a concentrarse con sus compañeros
Más de una treintena de establecimientos de Porvera protagonizaron ayer un apagón en sus negocios durante un cuarto de hora -de 20 a 20.15 horas- para protestar por el carril bus puesto en marcha con la nueva red de autobuses el pasado 12 de enero. Lo hicieron prácticamente todos, a excepción de una entidad bancaria y una tienda de telefonía. El resto de bares y tiendas apagaron las luces, cerraron sus negocio y salieron a la calle con el resto de sus compañeros.
Ni siquiera las últimas rectificaciones realizadas por el Ayuntamiento han mejorado su situación. Todo lo contrario, puesto que el portavoz de los afectados, Juan Sevilla, alerta de que ya se han firmado los primeros despidos por las pérdidas económicas. A esto hay que sumar las inminentes obras de saneamiento por las que un tramo de Porvera se corta al tráfico más de un mes. Por ello, la recién constituida plataforma “Porvera Viva” tiene claro que seguirá con esta medida “todos los días y la ampliaremos media hora más si hace falta a partir del lunes”. Sevilla sigue a la espera de que el Ayuntamiento le reciba para plantearle alternativas, entre las que destaca utilizar la plaza Salvador Allende como aparcamientos, como también piden los padres colegio San José, y que la separación del carril bus sea con una señal horizontal y “no con las aletas de tiburón”.