Se suicida uno de los 151 despedidos de BBK CajaSur

Los sindicatos han criticado la “purga” con la que está llevando a cabo BBK Bank CajaSur la reestructuración laboral de su plantilla después de que la entidad haya comunicado a 151 de sus trabajadores, uno de los cuales se ha llegado a quitar la vida, que deberán acogerse en tres días a las bajas incentivadas en el acuerdo laboral con la amenaza de ser despedido en tres días, lo que ha provocado un “auténtico drama”.

Según fuentes sindicales, el plan de reestructuración de la plantilla de la nueva entidad, surgida tras la adjudicación de CajaSur a la caja vasca BBK, incluía 428 prejubilaciones (13 eran jubilables pues cumplían los 65 años) y 415 entre prejubilaciones y bajas incentivadas.

El capítulo de las prejubilaciones se han cubierto en su totalidad, aunque su aplicación no será de inmediata y será progresiva, pero en el capítulo de las bajas incentivadas, que incluyen incentivos y primas, no se habían cubierto 151 cuando ya había terminado el plazo para acogerse a ellas de forma voluntaria.

La comisión de seguimiento del acuerdo laboral abordó el lunes la situación y el martes la BBK Bank CajaSur comunicó mediante una carta, según fuentes sindicales, a 151 trabajadores que serían despedidos pues la entidad “no contaba con ellos” si en el plazo de tres días no se acogían a la baja voluntaria.

Estas “bajas incentivadas forzosas” han provocado “un auténtico drama familiar”, según las fuentes consultadas, ya que la decisión afecta a cónyuges, hermanos e incluso llegaron a vincular la medida con la muerte de un trabajador, de 46 años y de Palma del Río (Córdoba), que se quitó la vida el pasado miércoles.

“Está siendo un golpe muy duro, dantesco”, insisten desde fuentes sindicales, que aseguran que entre los afectados se encuentran trabajadores que han estado “25 años de servicio a la empresa” o empleados de 35 ó 45 años.

Además, las fuentes critican la falta de criterios profesionales con las que se han llevado a cabo estas “bajas incentivadas forzosas” y cuestionan que se hayan planteado “o por lo civil o por lo militar”. Además, intuyen que “la purga” procede de “los informes de gestión de zonas” de la extinta CajaSur y no de informes realizados tras la adjudicación a la vasca BBK.

Los sindicatos se encuentran a la espera de la próxima reunión de la comisión de seguimiento, que se llevará a cabo el lunes de la semana que viene, en la que se informará del proceso de bajas y cuestionan la actitud de Aspromonte, sindicato mayoritario en la entidad cordobesa, que ha declarado que esa medida “es un mal menor” y que BBK Bank CajaSur se ahorraría un millón de euros si optara por los despidos en vez de ofrecer las bajas incentivadas.

De hecho, según Aspromonte, la entidad rechazó la propuesta presentada por los sindicatos de aplazar 20 días más el plazo fijado para proceder a los despidos forzosos para buscar vías alternativas no traumáticas para alcanzar el ahorro establecido.

También se planteó en la reunión de la mesa de seguimiento del acuerdo laboral ampliar a 52 años la franja de edad para las prejubilaciones, que se ha establecido en los 53 y cuyo cupo se ha cubierto en su totalidad.

También las fuentes sindicales están a la espera de que se les ofrezca información sobre el anuncio de fusión fría entre las tres cajas vascas y que no afecte a la plantilla de BBK Bank CajaSur, aunque, reconocen, que “el melón tendrá que comerse de alguna forma”.