Nadie quiere perdérselo. Cueste lo que cueste. CaixaBank, por ejemplo, ha puesto a disposición de los hinchas bermellones una línea de financiación de entre 500 y 6.000 euros sin intereses, con un tres por ciento de comisión de apertura del crédito, para los gastos del viaje y el pago de las entradas de la final de la Copa del Rey. Hoteles, restaurantes, bares. Todo lleno en Sevilla.
La entidad, que es patrocinador principal y socio financiero del Mallorca desde 2011, se involucró de lleno en la campaña para desplazar a la final de la Copa del Rey en Sevilla ante el Athletic Club de Bilbao a más de 21.000 aficionados del club balear.
El plazo para devolver el dinero es de 12 meses desde su contratación y CaixaBank promocionó los préstamos en todas las oficinas de la entidad en las Islas.
El banco, junto a las instituciones públicas de la Isla, compañías aéreas, navieras y empresas de transporte por carretera, contribuyó con esa iniciativa para que la movilización de seguidores bermellones sea la más numerosa en los 108 años de historia del club balear.
Esa ayuda se unió a la iniciativa de Halcón Viajes, la red de agencias de viajes de Ávoris Corporación Empresarial, que también puso a la venta plazas de avión y barco para acudir a la final del 6 de octubre en la capital hispalense bajo diversas modalidades de viaje y alojamiento.
La directora territorial de CaixaBank en Baleares, María Cruz Rivera, mostró su satisfacción por el acuerdo alcanzado con el Mallorca para colaborar en el desplazamiento masivo de aficionados a la capital hispalense.
"Estamos encantados de brindar esta oportunidad a todos los seguidores de este gran club como es el Mallorca, para que puedan acompañar a su equipo en un partido tan relevante. Este acuerdo refleja nuestro compromiso continuo con el Mallorca y su afición, y esperamos seguir celebrando muchos éxitos juntos", subrayó en una nota difundida por el club.
Alfonso Díaz, CEO de Negocio del Mallorca, también destacó en declaraciones a la Agencia EFE la aportación de CaixaBank en el desarrollo de la denominada "operación Cartuja", encaminada a llenar de aficionados los asientos del Gol Norte de recinto deportivo sevillano.
"Dentro de la mesa de trabajo que organizamos con todos los agentes económicos, como en este caso puede ser CaixaBank, patrocinador nuestro, uno de los objetivos importantes era facilitar a los aficionados el pago, tanto de entradas al estadio de La Cartuja como el de los viajes", explicó Díaz.
"Coger un avión, un barco, pueden representar cantidades elevadas para ciertas familias de tres o cuatro personas. CaixaBank echó un cable y lo que hemos hecho es una línea de financiación cuyas cantidades se pueden pagar a plazos, hasta 12 meses", añadió.
El director de Negocios de la entidad balear explicó, asimismo, que el club ya trabajaba con la entidad de crédito en la financiación de la compra de abonos para la temporada (LaLiga y Copa del Rey) con el objetivo de dar facilidades a los aficionados.
"Al final, viendo las cantidades tan importantes de las que estábamos hablando, quisimos ampliar esa iniciativa para que también incluyera los billetes de avión y el pago a las agencias de viajes por el traslado a Sevilla. Teníamos muy claro que contribuir al desplazamiento de 21.000 mallorquinistas, tanto a nivel logístico como financiero, era imprescindible para que pudiesen viajar a la final de la Copa del Rey en las mejores condiciones posibles", remarcó Alfonso Díaz.
50 millones de euros de impacto
Después de una Semana Santa pasada por agua en la que no han podido salir la mayoría de las hermandades y la facturación ha caído hasta casi la mitad, como ha lamentado la patronal hotelera; y antes de la feria de Abril, la fecha del próximo sábado 6 de abril figura en letras de oro en los libros de reservas de los hoteles, apartamentos turísticos, restaurantes y bares desde que Athletic de Bilbao y Mallorca alcanzaron la final.
El impacto económico de las últimas finales celebradas en Sevilla ha rondado los cincuenta millones de euros, como fue el caso de la última disputada en La Cartuja el pasado año entre el Real Madrid y Osasuna, o la anterior entre el Betis y el Valencia también en el mismo estadio.
En esta edición, la 'fan zone' del Athletic estará junto a la Torre Sevilla, al sur de la Isla de la Cartuja; y la del Mallorca, en el Parque del Alamillo, separadas ambas por unos cuatro kilómetros que discurren en paralelo al río Guadalquivir y frente al centro histórico de Sevilla, su zona monumental y la de mayor concentración de bares y hoteles.
Desde mediados de esta semana, se han empezado a ver por el centro de Sevilla a los más madrugadores, la mayoría de ellos bilbaínos, de los más de 75.000 aficionados que se esperan en la ciudad y de los que más de 30.000 se quedarán fuera al haber 20.698 para cada una de las aficiones, el 80% del aforo de 60.000 de La Cartuja.
Según los portales de reserva de habitaciones de hotel en los que aún queda alguna libre, los precios oscilan entre los 700 euros de una habitación doble a los más de mil que cuestan las más lujosas, céntricas y amplias, eso sí, con desayuno incluido.