Montañés, tras ser derrotado con relativa claridad en el primer set, se empeñó en una pelea sin tregua contra un auténtico frontón como Davydenko, capaz de devolver cualquier bola. La igualdad fue máxima y hubo que recurrir al desempate, tanto en el segundo como en el tercer set.
En ambos casos, Montañés tuvo la sabiduría y la suerte necesaria para alzarse con la victoria, tras dos horas y veinte minutos de partido.
El tenista español se enfrentará en semifinales con el vencedor del partido que disputarán el croata Ivan Ljubicic, cuarto favorito, y el finés Jarkko Nieminen.
Por su parte, el español Nicolás Almagro, tercer favorito, se clasificó para las semifinales del torneo de tenis de Viena, dotado con 650.000 euros en premios, al derrotar por 7-5, 3-6 y 6-3 al argentino Juan Ignacio Chela, octavo cabeza de serie, tras casi dos horas de partido.
