El presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ya ha tenido conversaciones en el consejo de administración de la compañía, debatiendo el ingreso del grupo saudí STC, a pesar de que el Gobierno aún debe aprobar la operación. Miembros del consejo han expresado inquietudes sobre esta inesperada incorporación, preguntándose si STC tiene intenciones de convertirse en un "accionista estable" y si ya ha manifestado su interés en obtener un asiento en el consejo administrativo de la empresa. Los trabajadores, por medio de los sindicatos, han expresado sus temores ante esta operación.
La entrada de STC a Telefónica se valúa en alrededor de 2.100 millones de euros, un precio que algunos consideran bastante bajo, lo que posiblemente facilitó la adquisición. Este movimiento estratégico fue coordinado con Morgan Stanley para mantener un perfil bajo en el mercado.
Según informa Europa Press, Álvarez-Pallete se ha reunido dos veces con los líderes de STC desde que se anunció la operación. Aunque no se han revelado los detalles de estas conversaciones, se presume que discutieron el desarrollo y los detalles de la adquisición de STC Group en Telefónica. Aun cuando se necesita la luz verde del Gobierno, parece que Pallete y STC están avanzando con sus planes.
Hasta el momento, no se ha recibido ninguna notificación oficial de STC al Ejecutivo. Es probable que el Gobierno no pueda imponer condiciones a la operación hasta recibir una comunicación oficial de STC, lo cual aún está en proceso.
Con la adquisición del 9,9%, STC se convierte en el principal accionista de Telefónica, superando a accionistas previos como BlackRock y BBVA. Las acciones de Telefónica han visto un incremento del 3,31% desde el anuncio, sin embargo, BlackRock ha incrementado su posición corta en Telefónica, apostando por una futura bajada en la cotización de la empresa.