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El Rocío de Cádiz ya está camino a la aldea de Almonte

Las inmediaciones de la parroquia de San José se llenaron desde muy temprano de gaditanos deseosos de acompañar al Simpecado por las calles de la capital

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  • Los rocieros de Cádiz delante del Simpecado de la Virgen afrontan los primeros kilómetros de camino. -
Jornada de sol, plegarias y mucha luz para iluminar la carreta que portaba el Simpecado de la Hermandad del Rocío de Cádiz. Las sevillanas y las palmas del Grupo Joven de la corporación pusieron música a los primeros kilómetros de la romería de este año. Es su manera de iniciar la peregrinación hacia las marismas almonteñas con un único objetivo en sus corazones: encontrarse con Ella, centro de su devocion, faro y guía de cualquier rociero. Un año más se echó de menos el sonido de los cohetes que anuncian la salida de la carreta, suprimido por las denuncias de los vecinos de la zona. Las inmediaciones de la parroquia de San José se llenaron desde muy temprano de gaditanos deseosos de acompañar al Simpecado por las calles de la capital.

La misa de romeros comenzó a las 8.15 horas sin que cupiera un alma en la Iglesia. El obispo de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, Antonio Ceballos Atienza, no pudo presidir la ceremonia por encontrarse en Madrid en una reunión con los obispos del resto de las diócesis españolas. Su lugar lo ocupó el director espiritual de la Hermandad del Rocío de Cádiz y párroco de San José, Óscar González Esparragosa.

El sacerdote recordó a los peregrinos que se deben tomar este camino como una alegoría de la vida del cristiano, que tiene que estar en continua búsqueda de María y su bendito Hijo: “La fe nos hace superar cualquier tipo de sacrificio, por la alegría que esperamos a alcanzar al final del mismo. Es como esta peregrinación que nos supone un esfuerzo, pero lo afrontamos con el deseo de llegar a la aldea y reencontrarnos con la Virgen”. González Esparragosa invitó a los rocieros a que esta experiencia no se quede sólo en la parte externa, “porque sería absurdo”. “Pedir a la Señora recibir un verdadero Rocío de Espíritu Santo para que cuando volvamos a los quehaceres del día a día continuamos el camino que emprendemos hoy”.

Las plegarias, a base de rumbas y sevillanas en honor de la Blanca Paloma, estuvo a cargo del coro de la hermandad gaditana. Un coro que lleva más de 25 años en activo y que cada vez suena más compacto.
Una vez terminada la solemne Eucaristía se procedió a la instalación del Simpecado en la carreta que se encontraba en la plaza de San José desde el justo momento en que comenzó la misa. La carreta, exornada con profusión de liliums amarillos y anturios rojos colocados por Manuel García Perales, lucía también sus tradicionales colgaduras de frutas, engalanadas con varios lazos que representaban a las banderas de Cádiz, Andalucía y España.

La carreta estrena este año las jarritas laterales, realizadas por el taller sevillano de Villarreal y confeccionadas por Manuel García Perales. La hermandad está ejecutando unas de las carretas más completas de cuantas se ven en la romería y, aunque todavía queda mucho por hacer, ya se empieza a vislumbrar cómo quedará una vez que el proyecto se finalice.

Sobre las 9.10 horas, la comitiva inició el camino hacia el casco antiguo de la ciudad. Los romeros, acompañando el Simpecado, recorrieron la avenida principal de la ciudad, atravesaron las Puertas de Tierra. A su paso, los niños de los colegios por donde iba pasando salían a la puerta para recibir la carreta y regalar flores a la Virgen.

El cortejo siguió su itinerario por la Cuesta de las Calesas y Plocia, hasta llegar a la Plaza de San Juan de Dios. Una vez allí la hermandad tuvo que aguardar unos minutos para ser recibidos por la alcaldesa de la ciudad, Teófila Martínez, que salió con el tiempo justo del Ayuntamiento para evitar tener que ver y escuchar a los parados que se encontraban en la plaza e impedir así que estos pudieran restar protagonismo al místico encuentro.

La edil hizo entrega al alcalde de carreta de un ramo de rosas blancas en representación de todo el pueblo de Cádiz. A continuación, la comitiva puso rumbo por la calle Sopranis hacia el Convento de Santo Domingo para encomendarse a la Patrona y obtener su bendición. El prior de los Dominicos, Pascual Saturio también tuvo unas palabras muy bellas para la Virgen del Rocío y para sus peregrinos, deseándoles una buena romería.
De esta forma, la comitivo puso ya rumbo al Río San Pedro, sumándose ya las distintas bateas que acompañarán al Simpecado por las arenas del Coto.Teófila Martínez hizo saber al hermano mayor de la hermandad, Manuel Montaño, su deseo de estar el sábado en la aldea para la presentación ante la Matriz de Almonte.

ángelus en salesianos
Antes de salir rumbo al Río San Pedro, el cortejo hizo una parada en la Iglesia de María Auxiliadora para rezar el Ángelus, a las doce del mediodía.

Al concluir la oración, la comitiva seguida de tres carriolas continuó su camino de salida por las calles Ejército de África, Pintor Zuloaga y Plaza de Madrid para seguir hasta el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil y cruzar el puente. El primer descanso se realizó en los Pinares del Río San Pedro para, una vez acabado éste, continuar viaje por carretera hacia Bajo de Guía, para preparar el embarque y cruzar el Río Guadalquivir. La hermandad llegó pasó a la otra orillas a las 20.30.

La humedad marcará la romería de 2010
El Plan Romero 2010 ha previsto la puesta en marcha de itinerarios alternativos en los caminos en los que las condiciones no son las adecuadas para que transiten las hermandades rocieras, debido a que las lluvias del pasado invierno dejaron algunas zonas intransitables. En el camino de Cádiz a través de Doñana, por el que hacen su peregrinación las diez hermandades de la provincia gaditana, se ha arbitrado un pequeño desvío de 1,5 kilómetros en la zona de La Plancha-Marismillas por un camino paralelo al habitual, una zona a unos ocho kilómetros de Malandar, en la que desembarcan las filiales procedentes de Sanlúcar.

El hermano mayor de la Hermandad del Rocío de Cádiz, Manuel Montaño, se desplazó hace unos días hasta el Coto de Doñana para supervisar el recorrido que tendrá que realizar la comitiva. Montaño explicó a este periódico que “está en buenas condiciones” y confirmó que en algunos puntos habían encontrado charcos que han provocado que una de las acampadas se haya tenido que trasladar a otro lugar cercano. Montaño destacó que en el coto se percibe todavía una humedad notable en el ambiente, por lo que los romeros tendrán que llevar varias prendas de abrigo y mantas para cubrirse una vez que caiga la noche.

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