Estamos en mitad de un diciembre sombrío que ha perdido su esencia, o al menos gran parte de ella. Un mes que sigue marcado por el Covid-19 y las restricciones para confrontar la pandemia, pero que también destaca por el silencio o la ausencia de la algarabía festiva propia de estas fechas. Hay dos municipios que se han quedado huérfanos de uno de sus mayores distintivos por la crisis sanitaria: Jerez y Arcos y sus respectivas zambombas. Tradiciones festivas que desde hace cinco años gozan de la titularidad concedida por la Junta de Andalucía como Bien de Interés Cultural, otorgadas por sus características antropológicas, culturales y sociales, que hacen de ellas unas manifestaciones singulares y únicas, cuyos valores se adentran en la historia de las tierras donde nacieron y que se han transmitido desde antaño.
Ahora, en un intento por salvar este sello característico de la Navidad en Andalucía Occidental, y más concretamente en esta tierra, han tenido que ser transformadas en recitales y espectáculos flamencos, aunque sea para no olvidar las particulares letras de estos villancicos, o al menos para que se pueda soñar por unos instantes con otros tiempos que sí que fueron mejores. Dejando a un lado si es conveniente o no seguir llamando a estas actuaciones zambombas, pues carecen de su principal elemento -el de la celebración compartida, el calor de los amigos y vecinos cantando o intentado al menos seguir el compás de estas letras-, son una clara muestra del folclore que emana Jerez y Arcos cuando el nacimiento del niño Jesús llama a la puerta.
Y en honor a ese acervo popular, además de zambombas virtuales, zambombas balconing, como la acontecida en El Almendral - en la que los vecinos salieron a sus balcones engalanados y cantaron al unísono villancicos de la tierra, iniciativa que se prevé que se repita en las próximas semanas-, ahora es la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta la que se ha encargado de confeccionar un programa de recitales navideños flamencos con el que se pretende mantener el rico patrimonio cultural de Jerez y Arcos, así como dar también nuevas oportunidades laborales a los artistas, todo ello en el marco actual de crisis sanitaria extremando las medidas de seguridad y ante la imposibilidad de ofrecer, como en años anteriores, unas zambombas abiertas, donde el disfrute y la convivencia sean posibles.
Iniciativas que se han llevado a cabo por la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales, a través del Instituto Andaluz del Flamenco, en colaboración con la Real Escuela de Arte Ecuestre: tres grupos de artistas flamencos ofreciendo un recital, en el que reaviven sobre las tablas el sentimiento y la alegría que transmiten estas fiestas.
Este sábado ha sido el turno de Jerez, celebrado el recital en el Museo de Enganches. El próximo sábado, día 18 de diciembre, llegará la magia de la Navidad a Arcos al Teatro Olivares Veas, y al igual que en el caso de Jerez, las entradas serán numeradas y preasignadas. El espectáculo comenzará a las 16.00 horas y en él seguirán estando representadas las tradiciones flamencas más arraigadas de la tierra; encabezado por Tía Juana la del Pipa y con Eva de Rubichi, a las que acompañarán Anabel Rosado, Carmen Grilo, Tamara Tañé, Manuel Moneo, Juan Lara, Macarena de Jerez, Javier Ibáñez y Juan Manuel Moneo.
Lo que sí se notará en Arcos será la ausencia del mítico Coro Beatriz Pacheco, bandera e insignia de la zambomba tradicional arcense. Una asociación de mujeres que lleva casi 30 años haciendo historia en este municipio de Cádiz, y que debido a que la mayoría de socias entrarían en la población de riesgo por edad, no han podido llevar a cabo los ensayos en estas fechas. Aún así, durante el acto está previsto que se les realice un homenaje por su extensa trayectoria y la importancia del mismo en las navidades de Arcos.
Actividades e iniciativas hechas de buena voluntad pero que quizás no lleguen a colarse en lo más profundo de nuestra memoria para ser contadas cuando pasen los años. Quizás nos quedemos con el recuerdo de que 2020 se llevó todo, incluso las zambombas, pero que algún Calle de San Francisco o Al pasar por Casablanca se llegó a escuchar en tablaos o balcones de aquel invierno difícil de olvidar, que dejaron los rescoldos de las candelas encendidas para que prendieran con facilidad en las zambombas 2021 y quizás ese también fue el año que este término logró estar presente como tal en la RAE.