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El I Raid de Aventura de Arcos fue más duro de lo esperado

Las condiciones meteorológicas aumentaron la dificultad de la prueba. Ninguno de los 33 equipos inscritos logró completar el recorrido. El equipo arcense finalizó en octavo lugar de la categoría ‘Promoción’, con Diego Zambrano y José Luis García

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  • Raid de Aventura de Arcos. -

El I Raid de Aventura celebrado en Arcos este pasado fin de semana ha sido un éxito de organización y de participantes ya que todos los equipos que han tomado parte en la prueba han terminado muy contentos por el entorno en el que se ha desarrollado la carrera y por la gran acogida que Arcos ha dispensado a los inscritos, tanto por parte de la Delegación de Deportes como por los habitantes de la ciudad y de los miembros de la organización, que corrió a cargo del club Íberos, integrado por el almeriense Toni Martínez y el campeón arcense de raid Juan José Bautista Téllez, verdadero especialista de la disciplina y uno de los mejores ‘raiders’ de España, que esta vez no compitió al formar parte del operativo organizador. El recorrido ha sido uno de los factores decisivos para satisfacer a los corredores que han tomado parte en la prueba -valedera tanto para la Liga Española de raids como para la Liga Andaluza- y, sobre todo, el magnífico entorno geográfico de la comarca, que ha sido una verdadera sorpresa en sentido positivo para los deportistas venidos de fuera, que lo han sido en su mayoría. Otro aspecto relevante en el desarrollo de la competición ha sido el gran trabajo previo de confección de los mapas para la orientación específica de los competidores durante el recorrido, pudiéndose orientar bastante mejor que con los acostumbrados mapas militares, que cuentan con menos detalles que los planos preparados por la organización.


La competición fue muy dura y sufrida y han habido equipos que lo han pasado muy mal al no contar de antemano con la dureza de la carrera por ser un recorrido muy técnico y lleno de cuestas pronunciadas. La primera prueba de bicicleta -de 43 km de distancia-, después del ‘score’ urbano fue decisiva, ya que los equipos que acertaron eligiendo la ruta más adecuada fueron los que salieron beneficiados tanto en tiempo como en puntos conseguidos en los controles. Las malas decisiones al escoger la ruta perjudicaron entre 10 y 15 minutos a aquellos equipos que no acertaron en su elección, así como por la dificultad y distancia del recorrido y la limitación del tiempo de llegada a la meta hasta las diez de la noche. También se celebró una prueba de ‘trekking’ urbano por el Barrio Bajo, alternada con las pruebas de cuerda de habilidad y de patines, que agradó bastante a los corredores, ya que buena parte de la misma se transcurrió por el casco urbano y las Callejas, siendo el tramo de patines muy acertado al no presentar una gran dificultad técnica, lo que hizo más asequible la intervención de la mayoría de los participantes. Sin embargo, en esa sección ocurrieron los dos percances más destacados de la prueba: un desmayo de un participante en la modalidad de cuerda, causado por un virus contraído la noche anterior que afectó también a otros pacientes de la localidad -según declaró un portavoz del centro médico- que precisaron de asistencia facultativa en el Hospital de Jerez, teniendo que acudir la ambulancia para trasladar al ‘raider’ al centro hospitalario. El otro incidente digno de mención fue la mordedura de un perro a un corredor en la pierna, siendo trasladado a urgencias del Hospital de Villamartín. Afortunadamente, la herida no fue grave y no resultó dañada ninguna articulación importante. Posteriormente, tuvo lugar la prueba de kayak, muy larga y con un tiempo adverso al soplar un viento de gran intensidad que alejaba a los corredores de las balizas, existiendo equipos que tuvieron que olvidarse de esos puntos de control al no poder superar las inclemencias meteorológicas y resultarles imposible avanzar en el agua del embalse de Arcos debido al intenso viento.


Si bien es cierto que las pruebas anteriores ya suponían una gran dificultad para los participantes, la que alcanzó los límites de lo imposible fue el ‘trekking’ largo, de 22 km de distancia, que salía desde el Barrio Bajo hasta la Residencia Girasol en la Cuesta de la Escalera y desde ahí hasta el Cortijo Barranco, teniendo que llegar casi hasta la localidad vecina de Bornos, con la dificultad de hacerse de noche y con lluvia abundante. Muchos equipos llegaron a Bornos muy justos de fuerzas sobre las diez de la noche, cuando esa hora era el tiempo señalado para llegar a la meta de Arcos, no pudiendo realizar la prueba de bicicleta desde Bornos a Arcos como estaba previsto, teniendo que hacer meta en la localidad bornense, todo ello debido a la gran dureza del terreno y lo técnico del mapa y de las balizas. Ningún equipo logró completar el recorrido total del raid, aunque cuatro de ellos regresaron en bicicleta al Recinto Ferial de Arcos pero dejándose balizas sin cubrir en el camino. El resto de equipos no salió para no penalizar con la eliminación absoluta de la competición, lo que da una idea fidedigna de la tremenda dureza de la prueba disputada en suelo arcense, en la que solo cuatro equipos de los 33 que intervenían pudieron llegar a la meta.
El domingo se llevó a cabo una prueba de bicicleta de 14 km de distancia, con una prueba especial en lo alto de La Peña que se podía cubrir tanto en bici como en un ‘trekking’ posterior.


La mayoría de equipos la realizó en bici, llegando a la meta con caras desencajadas porque no se esperaban las cuestas que tenían que superar para llegar a La Peña, donde se celebró la prueba de latiguera o tirachinas, una modalidad ‘especial’  y fuera de lo común, pero muy divertida, que los corredores afrontaron al límite de sus fuerzas tras subir las empinadas cuestas arcenses, lo que les costó la misma vida, acertando en el blanco muy pocos competidores.


Los que escogieron la bicicleta para subir a La Peña se equivocaron en su decisión ya que luego tenían que afrontar la sección a pie de 14 km por la zona de La Herradura y dentro del casco urbano (en las Callejas), así que el corredor que eligió correr a pie en vez de en bici se ahorró el tener que subir de nuevo hasta esa escarpada zona del pueblo. Otro aliciente que añadió interés y dificultad a la competición fue el alto nivel de la corriente del río Guadalete a causa de las lluvias caídas, debiéndose  abrir las compuertas para desaguar los embalses de Arcos y Bornos, por lo que a los equipos que cruzaron el río les llegaba el agua hasta el pecho teniendo que hacer malabarismos para poder llegar hasta la orilla. Algunos se las vieron y desearon para alcanzar el otro lado, pero por fortuna no ocurrió ningún incidente que lamentar. El tiempo fue más benigno la jornada del domingo lo que propició que todos los equipos que tomaron parte cubrieran los puntos de control y que entraran en el tiempo fijado, pero la etapa resultó decisiva al producirse cambios importantes en la clasificación siendo larga y dura, pero sin registrar incidentes. Respecto a los representantes de Arcos en la carrera hubo un equipo, el “Veni, Vidi, Vinci”, que se atrevió a apuntarse a un evento tan duro sin saber de qué iba la cosa, el integrado por Diego Zambrano, presidente del C.D. Piragüismo Arcos, y su compañero José Luis García Nieto, que acabó en octavo lugar de la categoría ‘Promoción’ y con muchas ganas de querer hacer algo más destacado de aquí en adelante. Es muy posible que ambos corredores intervengan próximamente en Baños de Montemayor (Extremadura) en otra de las pruebas que componen la Liga Española de Raid de Aventura con idea de afianzar un equipo arcense en la liga de raids durante buena parte de la temporada.


Lo más importante es que todos acabaron muy satisfechos y la mayoría de los que tomaron parte en el I Raid de Aventura de Arcos de la Frontera quedaron encantados y enamorados de la belleza de los parajes arcenses, prometiéndose volver a la ciudad como visitantes y/o turistas.
Asimismo, el I Raid de Aventura de Arcos de la Frontera ha incidido muy positivamente tanto en el comercio como en la hostelería de la población, que registró una ocupación del cien por cien en su capacidad de alojamiento así como una gran afluencia en los  bares y restaurantes, que tam-bién han obtenido su recompensa por la celebración de esta competición.


Todos terminaron con-tentos y el representante del club Íberos, Juan José Bautista Téllez, manifestó su agradecimiento a la Delegación de Deportes por su colaboración así como a la Policía Local, Protección Civil, Cruz Roja y Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer, pronosticando que “puede haber una segunda edición tras el éxito logrado y el gran impacto económico alcanzado en la industria hostelera local y en los comercios de Arcos de la Frontera”.

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