El Hospital de Jerez ha respondido a la llamada de auxilio que el pasado jueves lanzaba el comité de empresa de Lisan, la nueva concesionaria desde el pasado 1 de junio del servicio de limpieza de las dependencias sanitarias del SAS y centros de salud, al menos por este fin de semana. Así lo confirmaron ayer representantes de la plantilla tras reforzarse el turno de la noche con una trabajadora más, de manera que pasan a ser dos en vez de una, y con una contratación más para el turno de la mañana y otras cuatro para el de la tarde. El último fin de semana, como advirtió el comité de empresa, tan solo hubo seis mujeres para todo el hospital, con lo que de momento seguirán vigilantes a la espera de lo que ocurra estos días.
Parece que la denuncia de la plantilla empieza a surtir efecto y la gerencia sanitaria de Jerez ha tomado cartas en el asunto pese a que días antes había asegurado al propio comité que no tomaría medidas hasta que no hubiera hojas de reclamaciones. Un extremo que si no se ha dado ha estado a punto, a juzgar por la rápida respuesta, tras haber requerido a la concesionaria en cuestión de 24 horas para que diera marcha atrás y cubriera las vacaciones de la plantilla, que ha empezado julio con menos de la mitad de personal ante la intención de la nueva empresa de no realizar ninguna contratación. Una postura que estos últimos días se ha traducido en crisis de ansiedad entre las trabajadoras, después de que el jueves hubiera 25 limpiadoras menos en el turno de mañana y cúmulo de suciedad en el hospital.
La plantilla de limpieza no supera las 110 trabajadoras y aseguran que desde que llegó Lisan se sienten “vejadas y humilladas” y ni siquieran tienen productos para su trabajo. Por eso no descartan hacer paros en septiembre.
