La Policía Nacional ha desarrollado en el municipio malagueño de Estepona la operación 'Canastera', que ha permitido detener a dos jóvenes, de 21 y 23 años, como presuntos responsables, hasta el momento, de ocho delitos de robo con fuerza. La autoridad judicial ha ordenado su ingreso en prisión.
A uno de los detenidos se le atribuye, además, un delito de tráfico de estupefacientes. Los arrestados actuaban principalmente en viviendas de las zonas de Cancelada, Bel Air, Costalita, Isdabe y otras urbanizaciones próximas.
Las investigaciones se iniciaron en noviembre del año pasado, después de que la Policía Nacional tuviera conocimiento la comisión de un robo con fuerza en una vivienda de la avenida Bel Air, de donde habían sido sustraídos diversos efectos y joyas valorados en 33.500 euros.
El día 4 de abril se conoció que se había producido un robo con fuerza perpetrado en un domicilio ubicado en la zona de Cancelada del que fueron sustraídos distintos objetos de valor y, además, le habían sustraído un vehículo. El día 15 del mismo mes, un ciudadano interpuso una denuncia ante la Policía Nacional por el robo sufrido en su vivienda también de esta urbanización, de donde le sustrajeron distintos efectos y joyas.
Ese mismo mes, el día 28, un vecino de la zona informaba sobre un robo en su domicilio, del que le sustrajeron efectos de valor y varias piezas de joyería, según han informado en rueda de prensa en Estepona.
El pasado 2 de junio se recibió una denuncia por un robo con fuerza en casa habitada ocurrido durante la noche mientras que los inquilinos dormían en su interior. Igualmente, unos meses antes, en febrero, el denunciante había sido víctima de otro robo con fuerza en el mismo domicilio. Continuando con las indagaciones policiales, en una vivienda de la calle Tolete de la localidad habían robado en otras dos ocasiones.
Según las primeras pesquisas, detrás de los robos podrían encontrarse unos jóvenes residentes en la zona afectada, encabezados por uno de 23 años con antecedentes por delitos contra el patrimonio y que, pese a no conocérsele actividad laboral remunerada alguna, llevaba un elevado tren de vida.
MODUS OPERANDI
Para cometer los robos se desplazaban en vehículos, que han sido intervenidos. Así, una vez que seleccionaban el objetivo accedían al mismo mediante la técnica del escalo, es decir, aprovechando cualquier ventana o puerta abierta y en algunos casos rompiéndolas para sustraer todos los objetos de valor que encontraban.
Según ha informado la Policía Nacional, actuaban a cualquier hora del día o de la noche. En uno de los casos investigados entraron durante la noche cuando sus inquilinos estaban durmiendo.
Posteriormente, los efectos obtenidos en sus actividades delictivas eran revendidos o almacenados en una de las viviendas de los arrestados, a los que hasta el momento se les atribuyen ocho robos, aunque no se descartan otros similares cometidos en la localidad en los últimos meses.
Durante el operativo se ha practicado un registro en el domicilio del principal investigado en el que se han recuperado desde palos de golf hasta piezas de joyería, relojes, bisutería y numerosos aparatos electrónicos como ordenadores, iPads, televisores, DVD, impresoras, cámaras fotográficas, altavoces, auriculares y teléfonos móviles, entre otros efectos.
Igualmente se han intervenido dinero en efectivo, 30 gramos de cocaína, 11 de cristal, 130 de hachís, 11,5 MDMA, útiles para el tráfico de estupefacientes así como una pistola de aire comprimido oculta dentro de la campana extractora de la cocina.
