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Varufakis dice que Grecia está deseosa de reformas, pero con otro enfoque

Según Varufakis, la diferencia principal entre la visión del Gobierno heleno y la de los acreedores radica en que éstos se aferran a recetas que han fracasado y que denomina las "trampas" de la austeridad y de las reformas

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  • Varufakis -

El ministro griego de Finanzas, Yanis Varufakis, recalcó hoy que el Gobierno de Atenas "está deseoso" de proceder a una serie de reformas y que comparte buena parte del diagnóstico que hacen los acreedores sobre la situación del país, pero no las recetas que deben aplicarse.

"Los desacuerdos con nuestros socios no son insalvables. Nuestro Gobierno está deseoso de racionalizar el sistema de pensiones (por ejemplo, limitando la jubilación anticipada), de proceder a la privatización parcial de bienes públicos, de hacer frente a los créditos morosos que están obstruyendo el flujo de crédito, de crear una comisión tributaria totalmente independiente, o de fomentar el espíritu empresarial", dice Varufakis en un artículo colgado hoy en su blog.

Según Varufakis, la diferencia principal entre la visión del Gobierno heleno y la de los acreedores radica en que éstos se aferran a recetas que han fracasado y que denomina las "trampas" de la austeridad y de las reformas.

A juicio de Varufakis, el método utilizado por la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo, Fondo Monetario Internacional) de fijar para la deuda unos objetivos determinados de porcentaje en una fecha concreta acabaron teniendo el efecto contrario al deseado.

Para lograr esos objetivos era necesario fijar unos superávit primarios de tal magnitud que acababan teniendo un efecto negativo sobre la economía, lo que a su vez hacía imposible lograr la meta fijada.

En lugar de este modelo, "debemos trazar un plan a futuro basado en suposiciones razonables para el superávit primario, que sean consistentes con las tasas de crecimiento de la producción, la inversión neta y la expansión de las exportaciones y que puedan estabilizar la economía y la relación deuda-PIB de Grecia", dice.

En el caso de que esto suponga que el porcentaje de la deuda de Grecia supere en 2020 el objetivo previsto del 120 %, habrá que buscar fórmulas "inteligentes para racionalizar, reperfilar, o reestructurar la deuda", propone Varufakis.

En su análisis, el ministro hace un balance similar respecto a las reformas exigidas por los acreedores, basadas fundamentalmente en una devaluación interna, en la bajada de salarios y pensiones y la pérdida de la protección laboral.

"Nuestros socios creen que con el tiempo este programa va a funcionar, que si los salarios bajan aún más, el empleo aumentará, que la manera de curar un sistema de pensiones en crisis es recortando las pensiones y que en las privatizaciones se debe aspirar a obtener mayores precios de venta para pagar la deuda que muchos (en privado) coinciden en que es insostenible", escribe Varufakis.

Según el ministro, los recortes salariales y de las pensiones, como los siguen exigiendo las instituciones, no ayudarán a mejorar la situación de las empresas orientadas a la exportación, que están sumidas en una crisis crediticia, ni resolverán los problemas del sistema de pensiones, cuyas causas reales son la reducción del empleo y el enorme volumen de trabajo no declarado.

Estas medidas, sostiene, "solo causarán un mayor daño al ya de por sí estresado tejido social de Grecia, haciéndolo incapaz de proporcionar el apoyo que necesita desesperadamente nuestra agenda de reformas.

Con todas estas diferencias, el ministro cree que es posible llegar a un acuerdo inmediato con los socios, si Grecia consigue convencerlos de que su visión es "estratégica y no táctica" y sus planteamientos son "sólidos", y los acreedores, por su parte, dejan a un lado "un enfoque que ha fracasado".

Varufakis asiste hoy en Riga a la reunión del Eurogrupo en la que se hará un balance sobre las negociaciones que ha mantenido Grecia con los acreedores para lograr el desembolso del último tramo del rescate por valor de 7.200 millones de euros.

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