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Detenido por conducir en sentido contrario más de 23 kilómetros por una autovía en Murcia

Según informa el Instituto Armado, el turismo se dirigía hasta Alhama de Murcia pero circulaba por la calzada reservada al sentido Cartagena, por lo que se estableció un dispositivo para su localización y detención

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La Guardia Civil ha detenido en la madrugada de este jueves a un individuo, inglés y de 69 años, residente en Cantoria (Almería), tras ser interceptado circulando en sentido contrario al estipulado durante más de 23 kilómetros por la autovía RM-2, a la altura de Alhama de Murcia.

   Agentes de la Guardia Civil del Sector de Tráfico de Murcia, por medio de la Central Operativa de Servicio de Tráfico (COTA) y tras ser alertada por el '1-1-2', tuvieron conocimiento, sobre la media noche, de la circulación de un vehículo en sentido contrario en la autovía RM-2, que une las localidades de Alhama de Murcia y Cartagena.

   En concreto, según informa el Instituto Armado, el turismo se dirigía hasta Alhama de Murcia pero circulaba por la calzada reservada al sentido Cartagena, por lo que se estableció un dispositivo para su localización y detención.

   Una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico, tras poner en marcha el protocolo de seguridad establecido para estos supuestos, interceptó el turismo a la altura del Kilómetro 8 de la autovía, después de haber circulado en sentido contrario desde el punto kilométrico 31 de la misma vía, enlace con la autovía A-30 (Albacete -Cartagena).

   Los guardias civiles, una vez detenido el vehículo, identificaron a su conductor, de 69 años, y efectuaron su detención como presunto autor de delito de conducción temeraria.

   La decidida actuación de la patrulla de la Guardia Civil evitó la ocurrencia de algún accidente de circulación con resultados imprevisibles, como el ocurrido el pasado 1 de enero cuando un conductor que circulaba en sentido contrario colisionó con otros vehículos a la altura del Puerto de la Cadena, resultando varias personas heridas de diversa consideración.

   Este tipo de delitos se encuentran recogidos en el Código Penal y pueden ser castigados con penas de prisión de seis meses a dos años y la privación de derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta seis años.

   El arrestado y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Totana (Murcia).

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