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Miércoles 03/07/2024  

Campo de Gibraltar

Detenidos tres miembros de una banda que hurtaban en centros comerciales

La detención se produce en Sevilla, aunque habían actuado con anterioridad en centros comerciales de Algeciras, entre otras poblaciones

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La policía ha detenido en Sevilla a tres personas acusadas de formar una banda organizada especializada en cometer pequeños hurtos sistemáticos en centros comerciales de Algeciras, Valencia, Castellón, Cartagena, Elche, Cádiz y de la capital andaluza.

Los detenidos, A.C., de 33 años, W.J., de 31, y A.C., de 53, estaban especializados en apropiarse de pequeños electrodomésticos, videojuegos, DVD, cámaras de fotografía y vídeo valorados en más de 3.000 euros.

Según un comunicado de la policía, dos de los detenidos fueron sorprendidos en un centro comercial de Montequinto (Dos Hermanas) cuando sustraían distintos artículos electrónicos y de informática.

A la llegada de los agentes, y tras el visionado de las cámaras de seguridad, los policías se percataron de la existencia de una tercera persona que habría facilitado la labor delictiva de los autores materiales y que consiguió huir del lugar al comprobar que aprehendían a sus compinches.

Posteriormente, los agentes consiguieron localizar y detener al tercero de los integrantes de este grupo, que tenía domicilio en el mismo barrio de Dos Hermanas donde ocurrieron los hechos.

La policía señala que el empleo de hasta 25 identidades de las que hacían uso dificultó su detención.

Tras la detención de este último implicado, los agentes intervinieron un vehículo utilizado para cometer el delito junto con 30 videojuegos, varias cámaras de vídeo y fotografía de alta gama y otros productos electrónicos valorados en 3.000 euros.

Paras los robos, dos personas, un hombre y una mujer, entraban en el centro comercial y se dirigían a los expositores donde estaban los videojuegos y otros artículos similares, y mientras uno de ellos vigilaba y observaba la posición de las cámaras de seguridad, el segundo cogía los efectos y los colocaba en zonas ciegas, donde no tenía alcance el sistema de videovigilancia.

Posteriormente, el tercer integrante se apoderaba de los artículos y los ocultaba extrayendo los DVD de las carcasas o envolviendo los efectos en papel de aluminio para evitar las alarmas.

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