El Gobierno municipal continuará con el proceso de remodelación de la Plaza de la Pastora una vez concluido el verano, tal y como ha sido deseo de las entidades y los propios vecinos de la zona. Así lo comunicó el teniente de alcalde de Desarrollo de la Ciudad, Ángel Martínez, que afirmó que en septiembre se procedería a la adjudicación de estas obras. Estas obras cuentan con una partida de 68.247 euros incluida en los presupuesos municipales del actual ejerició económico.
Principalmente la reforma consistirá en la repavimentación del entorno de la plaza. También se mejorará el arbolado con la colocación de árboles de porte grande en el corazón de la histórica plaza, donde también se emplazarán farolas de báculos.
La plaza incrementará su espacio sensiblemente al incluir también el tramo de la calle Santa Rosalía, entre Marconi y Daniel González, colindante a este espacio público. Los contenedores de basura se desplazarán a una de las esquinas de la plazoleta, más alejada del templo. También en la zonas próximas a las calles Daniel González y Marconi se redistribuirán las plazas de aparcamiento disponibles y se adecuarán también bicicleteros.
El proyecto se completa también con farolas de nueva colocación en el entorno y con luces led empotradas en el suelo de la plaza. Además se incluyen bancos prefabricados con jardinería que se reparten a lo largo del perímetro de la plaza y se combinan con los de hierro fundido.
Con estos trabajos el Gobierno de José Loaiza quiere dar respuesta a una histótica demanda de los vecinos del barrios ejecutando un proyecto que ha sido consensuado con vecinos y entidades. “Hemos intentando aunar los intereses de todos sabiendo que íbamos a actuar con un espacio que es un icono para muchos ciudadanos. Esperamos que la remodelación cumpla con el objetivo que tiene, de accesibilidad y mejora, pero también que siga conservando el espíritu de uno de los barrios más importantes de nuestra localidad”, dijo Martínez.
A los vecinos y comerciantes, el edil del PP pidió “disculpas de antemano” por que “todas las obras conllevan molestias, pero el resltado final seguró que merecerá la pena y la Plaza de la Pastora aparecerá renovada y modernizada sin haber perdido todo su encanto”.