El vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, explicó que la reforma de la Ley Concursal, cuyos principales detalles fueron adelantados en diciembre, es “importante” porque “facilita la viabilidad de las empresas” y busca “aliviar” la carga de trabajo que afrontan los juzgados mercantiles, los que tramitan estos procedimientos.
El Ministerio de Justicia destacó de hecho que la nueva normativa “configura el concurso de acreedores como una segunda oportunidad”, ya que mejora las alternativas a estos procesos, como son las refinanciaciones de deuda.
Entre las principales novedades de la reforma de la Ley Concursal destaca que una mayoría de entidades financieras podrá imponer al resto un acuerdo de refinanciación de deuda, con lo que se evitan así las minorías de bloqueo que han llevado a muchas sociedades al concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos).
La reforma no incluye grandes variaciones respecto al anteproyecto de ley estudiado el pasado mes de diciembre, pese a las recomendaciones que habían hecho los órganos.